Alimentación

¿Por qué tengo que comer uvas?

¿Por qué tengo que comer uvas?
¿Por qué tengo que comer uvas?larazon

Fruto de la parra o vid, de textura carnosa y forma redonda u ovalada, que nace en largos racimos. El color de su piel es diferente según la variedad de la uva, oscilando entre los tonos verdes, rojizos, púrpuras o amarillentos.

Si cumplimos con la máxima de consumir entre 3 y 5 piezas de fruta al día, eligiendo uvas deberíamos tomar entre 10 y 12, lo que suponen unos 100 gramos de esta fruta.

Solas en el desayuno, a media mañana o media tarde, y como guarnición de ensaladas (especialmente las de queso de cabra). En bizcochos y postres resultan exquisitas, y en una copa de vino uno de los mayores placeres que existen, y a los que no debemos renunciar.

Dependerá de la variedad de la uva en cuestión; la uva blanca es la que menos calorías aporta por cada 100 gramos, unas 43 kcal, mientras que la borgoña es la que más, presentando unas 82 kcal. La media son unas 70 kcal por cada 100 gramos de parte comestible cruda.

Las uvas se ha demostrado recientemente que ayudan a flexibilizar las arterias y a regular el colesterol malo, además de ayudar a bajar la presión sanguínea nocturna.

Por su alto contenido en azúcares, los pacientes diabéticos deben consumirlas solamente en las horas centrales del día, y las personas obesas deben moderar su consumo. Las uvas ácidas no se aconsejan en personas con trastornos de estreñimiento, renales o hepáticos.