Pasarela LA RAZÓN: La celebración de la moda con nombre propio

La pasarela que organiza LA RAZÓN reunió en el Hipódromo de la Zarzuela de Madrid las creaciones de cinco diseñadores que desfilaron rostros conocidos de nuestro país.

El Hipodrómo de la Zarzuela de Madrid, un emplazamiento con envidiables vistas del distrito financiero de la capital, se impregnó el jueves pasado de las últimas tendencias de moda de nuestro país. Domminico, The Extreme Collection, Malne, Miguel Marinero y Hannibal Laguna fueron las firmas encargadas de exponer sus creaciones en la XI Pasarela de Moda LA RAZÓN, un evento que fue posible gracias a su directora, Isabel Adbó, y que congregó a decenas de «influencers», comunicadores, empresarios y numerosas personalidades del mundo de la moda.

Por la tarde se podían palpar los nervios previos al desfile en un «backstage» donde modelos y diseñadores daban los últimos retoques para el desfile posterior. Allí Arantxa de Benito transmitía su ilusión por «poder sentirme princesa por un día, y, sobre todo, porque mi hija ha venido a verme por primera vez a desfilar». También ultimaba la prueba de vestuario Marian Ávila, la primera modelo española con síndrome de Down en desfilar en la semana de la moda de Nueva York, que admitió que «cuando me subo a la pasarela no me pongo nada nerviosa porque me gusta mucho, sobre todo, que me peinen y me maquillen; cuando desfilas pasa todo muy rápido, es un sueño hecho realidad». Asimismo, Amal Fashanu, presentadora de la BBC, subrayó que «no quise perderme la oportunidad de participar en el desfile, es todo un orgullo que hayan contado conmigo y me hace muy feliz volver a España». Acto seguido se unió, para el ensayo general, al resto de sus compañeras: Clara Courel, Mon Rovi, Eva Zaldívar, María Jesús Ruiz, Beatriz Espegel, Raquel Meroño, Ángela Ponce y Natalia Cebrián.

Fueron las que, caída ya la noche y tras un «photocall» por el que pasaron numerosos rostros conocidos, subieron a la pasarela las prendas que las cinco firmas seleccionaron para la ocasión. Con Charles Aznavour como protagonista del repertorio musical, Domminico abrió el desfile con unas prendas en las que destacaron la piel, el pelo y las plumas de marabú. Las texturas predominantes fueron las reflectantes y el «animal print». «Se trata de una mezcla entre vanguardia y tradición, ya que tomo prendas de peletería tradicional y las actualizo», afirmó Domingo Rodríguez, diseñador de la marca.

MUJER PODEROSA

Le siguió The Extreme Collection, cuya propuesta dio protagonismo al terciopelo, las lanas y el super «crepe», sin dejar de lado una de sus señas de identidad, las «blazers»: «Hemos seleccionado prendas sobrias, pero elegantes, para que cuando una mujer se las ponga se sienta poderosa», explicó el CEO de la firma, Jorge García Magariños.

Malne, por su parte, impregnó la pasarela de noche y optó por presentar vestidos atrevidos, cuyo «leitmotiv» se basó en la obra de Gustav Klimt: «Se inspira en su máxima: “Como no le puedes gustar a todo el mundo, gústate a ti mismo”, por eso hay mucho negro, alta costura y, sobre todo, libertad», afirmaron sus directores creativos, Paloma Álvarez y Juanjo Mánez.

Miguel Marinero también apostó por el terciopelo y dio protagonismo a la naturaleza y los colores vivos, especialmente el granate, el azul y el rosa: «Pero lo importante es que las prendas van a lucirlas mujeres reales», destacó el diseñador. Por su parte, Hannibal Laguna puso el broche con una selección de piezas que trasladó al público al exotismo de Oriente y a sus jardines florales ancestrales: «Quiero dar una impresión de sobrecarga cromática, sobre un fondo “nude” y acercar las flores a la piel», concluyó el modisto.

La exitosa cantante Eva Ruiz puso el broche a la cita con su tema «Solo», que animó y puso a bailar a todos los presentes.

Y tras el desfile de Hannibal Laguna como colofón las modelos sorprendieron realizando el carrusel final con un guiño de lo más original a la marca española de gafas Hawkers llevando cada una un diseño diferente de lentes de sol acorde con el último «look» que lucieron. La firma estuvo presente durante todo el evento, donde contó con un «stand» en el que los invitados podían hacerse fotos subidos a una estatua con forma de cebra. Sin duda, uno de los momentos más divertidos y únicos de la noche, que amenizó el animado cóctel del que pudieron disfrutar los invitados tras el desfile.