La ley de violencia de género y el apoyo LGTBI distancia a Vox del pacto PP-Cs

Hoy se reúnen de nuevo los negociadores de las formaciones popular y naranja de cara a la composición de la Mesa del Parlamento, órgano clave para la elección del presidente.

Sobre la bocina y con la imagen de apurar hasta la cena de Navidad. PP y Cs anunciaron su acuerdo programático completo entre la tarde previa a la Nochebuena y la mañana de Navidad. El día 27 necesitan tener cerrado el apoyo de cuatro diputados de Vox en segunda votación o bien la abstención de PSOE y Adelante Andalucía, algo que se antoja complicado ya que la presidenta en funciones Susana Díaz mantiene el pulso de cara a la investidura. Hoy tiene lugar un nuevo encuentro para acordar la composición de la Mesa, de nuevo con la participación de Teodoro García Egea y José Manuel Villegas.

Una vez presentadas las medidas de regeneración política y las económicas, PP y Cs anunciaron el paquete social. En total, 90 medidas, divididas en tres bloques, los dos primeros con guiños a Vox. La formación de Abascal, por su parte, mantiene la tensión con los naranjas. El juez Serrano anunciaba vía Twitter que «para Cs es más digno negociar en Andalucía con el partido de extrema corrupción, que traiciona a España pactando con ultra izquierda guerracivilista, golpista y filoterroristas, que pedir apoyo a Vox del que han oído hablar mal a esos ex socios a los que no desprecian». Santiago Abascal fue aún más contundente al comentar el acuerdo PP-Cs, si cabe: «Me preocupa que los que se disponen a gobernar Andalucía no sepan sumar. A no ser que ya hayan pactado con el socialismo, cosa probable porque en sus medidas no se incluyen un verdadero cambio». El bloque de medidas sociales agranda aún más la brecha con el quinto elemento del Parlamento andaluz e incluye la revisión trimestral del pacto, medidas para desarrollar la ley de igualdad y contra la violencia de género y la defensa de la ley de Lgtbi, todas ellas cuestiones para las que Vox plantea su derogación, como para la ley de memoria histórica, que, directamente, no se trata en el acuerdo.

Entre las medidas sociales, se cita la mejora de la atención a la dependencia, la «ley de apoyo a las familias andaluzas, adaptada a la realidad actual y a sus diferentes modelos, con especial atención a las familias numerosas y monoparentales», así como numerosas medidas de igualdad y género (algo disonante con las peticiones de Vox) al igual que el apartado expreso de defensa del colectivo Lgtbi. En el apartado de inmigración, se cita un plan de mejora de la política migratoria, con más recursos para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y para la atención de los menores no acompañados.

En el bloque económico destaca la «bajada de impuestos para la clase media y trabajadora», con, entre otras medidas, la bonificación al 99% del impuesto de Sucesiones y Donaciones; la rebaja de los tipos del Impuesto de Patrimonio; la rebaja del IRPF; o la reversión del Impuesto de Transmisiones. Para reducir el desempleo, aparte de ampliación a 24 meses de la tarifa plana para autónomos o la cuota superreducida, se creará un «sistema arbitral de segunda oportunidad» para las situaciones de sobreendeudamiento; el sistema de cheques-formación o la reforma del Servicio Andaluz de Empleo. El plan de competitividad para la agricultura, ganadería y pesca; el pacto por el agua, un nuevo texto refundido de la ley del suelo o la ley de economía circular completan las medidas de esta índole. PP y Cs también defienden la equiparación salarial de profesionales sanitarios y docentes con la media nacional. También, «10 minutos por pacientes». En Educación, además del refuerzo para reducir el abandono escolar, destaca la implantación de la educación gratuita de 0 a 3 años a lo largo de la legislatura y un plan de mejora de las instalaciones educativas, así como medidas para necesidades de atención temprana y la equiparación de la educación pública y concertada y su libre elección. Destaca asimismo, la esperada Ley de FP.

Marín se ve con la confluencia en Jerez

El candidato de Cs, Juan Marín, tuvo un encuentro en la estación de Jerez de la Frontera (Cádiz) con los líderes de Adelante, Teresa Rodríguez y Antonio Maíllo. Cs continúa con los intentos de no tener que recurrir a Vox, cuyo líder alertó: «Colocado el cordón sanitario. Cs rechaza sentarse con el partido de Ortega Lara, pero se sienta con los comunistas aliados de Otegui y de Torra. Así no se puede construir y no se va a construir una mayoría alternativa en Andalucía». El objetivo de la reunión, en la que también participó por parte de Cs Elena Sumariva, guarda relación con el reparto de la Mesa, ya que está en el aire que tanto Vox como Adelante puedan entrar con voz y voto. La victoria electoral del PSOE le garantiza dos de 7 puestos y PP y Ciudadanos pretenden sumar cuatro.