José Chamizo: «Cuando pase la crisis me voy, antes me parecería una huida»

El Defensor del Pueblo Andaluz en funciones, José Chamizo (Los Barrios, Cádiz, 1949), reflexiona sobre la situación de los más desvalidos de la comunidad en una época de verdadera calamidad económica y social en «¿Quien ha dicho que vivir sea fácil?», publicado por Espasa. Lennon cantó «living is easy with eyes closed» y parece que sigue siendo la mejor forma de sobrevivir a todo.

–¿Quién dijo que vivir fuera difícil?

–Hombre, fácil no es. Sobre todo cuando te coge en determinados sectores de la sociedad, cuando por el hecho de nacer tienes una familia en conflicto, sin los medios suficientes para estar educado o para tener una vida normal. Entonces, ciertamente, la vida se convierte en algo que no es tan fácil como aparentemente pudiera pensarse.

–La verdad es que en su libro, muy optimista, no se ve la situación.

–Bueno, tengo un capítulo dedicado a la esperanza, que creo que puede ayudar a sonreír un poco. Igualmente, algunas de las historias que cuento muestran mi experiencia personal. Entre esperanza y sonrisas hay mucho por construir, aunque está claro que la realidad es muy dura en este momento.

–En el libro habla de Manuel, un chico que odia el mundo gitano, pese a estar muy cerca de ese ambiente. ¿Estamos todos un poco como Manuel, cerca del lado de los excluidos?

–Estamos en el lado de los excluidos muchas personas de clase media. El drama del paro, cuando irrumpe en una familia normal, habitualmente, si se acaban las prestaciones, se termina perdiendo la vivienda y de ahí, poco a poco, se bajan los peldaños que conducen a la exclusión social. Evidentemente, nos encontramos con un problema, porque no tenemos habilidades sociales para vivir en este mundo.

–¿Cree que todo lo que está sucediendo responde a un plan determinado?

–Hay quien dice que sí. A veces, parece que todo responde a un plan previsto y otras va apareciendo poco a poco. Estamos demasiado metidos en un modelo economicista y a veces no somos capaces de construir un modelo con un trasfondo más humano. Aquí lo único importante es el beneficio económico, que creo que es necesario, por supuesto, pero junto a éste hay que hablar del beneficio humano. Por ejemplo, no se pueden deslocalizar empresas porque en otro país voy a ganar diez veces más que aquí.

–¿Se ha abierto la veda?

–Espero que no y que la sociedad la frenase en el caso de que se haya abierto.

–Andalucía está a la cola de todo en España y a la cabeza del paro. Aquí hay que hacer algo, ¿no?

–Por supuesto, pero eso pasa por crear un verdadero pacto político. Esto que se ha iniciado entre los partidos debe hacerse rápido porque la situación es de emergencia social.

–En su libro, habla de los menores y las mujeres. Al final, cuando las cosas vienen regular, los que siempre han estado mal ahora están peor.

–Sí, los niños forman el colectivo que más se ha empobrecido porque se han empobrecido sus padres. Durante el curso, con los comedores escolares, no hay problemas para que puedan comer, el problema llega en verano. En cuanto a las mujeres, aunque los últimos datos del paro aseguran que ha subido más entre los hombres, realmente hay muchas diferencias salariales. Cuando las cosas llegan mal, vienen peor para los de siempre.

–Sigue siendo el Defensor del Pueblo en funciones. ¿Hasta cuándo piensa seguir?

–No lo sé. Dependo de lo que diga el Parlamento, estamos en funciones funcionando, ésa es la verdad.

–Tendrá un horizonte, un límite, ¿no?

–A mí personalmente me gustaría irme cuando se vea la luz del túnel.

–¿Por qué no se han puesto de acuerdo los partidos?

–Hombre, renovarme otra vez serán muchos años, supongo...

–¿Estaría dispuesto a seguir en el cargo más tiempo?

–Creo que mi tiempo ya va terminando, un par de años como mucho. Cuando pase la crisis me voy, antes me parecería una huida. Hay quien interpreta con eso que yo estoy aferrado al sillón.

–Pero es cierto que desde que entró el nuevo Gobierno no hay consenso. ¿Quiere agotar la legislatura?

–Mi pauta es la crisis económica, cuando la gente esté mejor no me importa que venga otra persona detrás, que lo mismo lo hace mejor que yo.