Sucesos

Nuevos análisis indican que Julen quedó sepultado por un tapón que arrastró al caer al pozo

La titular del juzgado de Instrucción número 9 de Málaga considera que el dueño de la finca cometió presuntamente un delito de homicidio por imprudencia grave

Dispositivo de rescate de Julen en Totalán / EFE
Dispositivo de rescate de Julen en Totalán / EFElarazon

La titular del juzgado de Instrucción número 9 de Málaga considera que el dueño de la finca cometió presuntamente un delito de homicidio por imprudencia grave

La Guardia Civil ha confirmado que el pequeño Julen, fallecido en enero tras caer a un pozo de la localidad malagueña de Totalán, quedó atrapado bajo un tapón de tierra que arrastró su caída de unos 70 metros en él, incidiendo en que las muestras no presentan diferencias y son compatibles con los materiales geológicos de la zona. Así lo pone de manifiesto un informe elaborado por la Unidad de Medio Ambiente del Instituto Armado que ha analizado un total de 24 muestras tomadas en diferentes puntos del lugar, también de la zona en la que quedó atrapada la víctima y de restos encontrados en la mano y en el esófago del pequeño.

Los especialistas del Servicio de Criminalística inciden en su escrito en que todas las muestras presentan una mineralogía similar, excepto la recogida en el interior de la cuba del camión que presenta algunas diferencias aclarando, no obstante, que se desconoce los restos de tierras anteriormente depositados por lo que han podido mezclarse con la tierra extraída.

El Ministerio Público había solicitado la elaboración de un análisis de las muestras de tierra para descartar la existencia de piedras que hubieran podido causar el fallecimiento de Julen así como que hubiese sido enterrado intencionadamente.

Según los investigadores, el menor durante la caída libre habría arrastrado materiales de las paredes irregulares del pozo, ya que no estaba encamisado con ningún tubo y también hubo pequeños desprendimientos al intentar ayudar el padre y en las primeras horas del rescate. Sólo una muestra, la extraída de la cuba del camión, difiere del resto pero, en el informe la Guardia Civil lo atribuye a materiales depositados anteriormente en el vehículo.
La Fiscalía solicitó la pasada semana tres años de prisión para el dueño del terreno de Totalán, David Serrano, así como que indemnice a los padres del menor por la muerte de su hijo y a la Junta de Andalucía por el valor de los daños y perjuicios causados que se determinen en ejecución de sentencia. Según el escrito acusatorio, el acusado era el único conocedor de la presencia del pozo” y, “a sabiendas de todo ello y de la falta de protección suficiente y adecuada, no adoptó medida alguna para evitar cualquier posible resultado lesivo, poniendo en peligro la vida de los dos menores: su propia hija y el pequeño Julen que finalmente cayó por él”.