Castilla y León contabiliza 601 accidentes laborales más en el primer semestre de 2018

Castilla y León suma 601 accidentes laborales más durante el primer semestre de este año que en el mismo periodo que en 2017. Así ha denunciado el sindicato Comisiones Obreas (CCOO), que ha pedido a la Inspección de Trabajo la adopción de medidas, y que estas no sean sólo sancionadoras. De acuerdo con los datos que maneja el sindicato en los seis primeros meses del año se han registrado un total de 14.232 accidentes en el ámbito laboral, de los que 12.721 fueron con baja y 1.511 en itinere.

De estos siniestros, 23 fueron mortales, dos más que en el periodo enero-junio de 2017, aunque faltan por contabilizar los cuatro mortales ocurridos en junio pasado que, por diversas circunstancias - como carecer de contrato, ser la víctima una persona extranjera o no estar afiliada a la Seguridad Social- no han pasado a la estadística de la Comunidad Autónoma. Los accidentes graves fueron 111, de los cuales 97 produjeron baja laboral y catorce fueron en itinere, es decir en el trayecto al puesto de trabajo, y los leves llegaron a los 14.058, con 12.106 siniestros con baja y 1.452 en itinere.

Según los datos de CCOO de Castilla y León, en el primer semestre de 2018 se ha registrado un incremento de 594 accidentes leves, de cinco accidentes graves y, hasta mayo, de dos siniestros mortales, informa Efe.

Ante este repunte de la siniestralidad laboral, la secretaria de Salud Laboral y Juventud de CCOO de Castilla y León, Sheila Mateos, ha pedido a la Inspección de Trabajo que no se limite a adoptar medida sancionadoras y que exista un mayor control de los planes de riesgo laborales que hacen las empresas.

«No puede ser un corta y pega», ha denunciado la secretaria de Salud Laboral de CCOO, en alusión a que cada empresa, en función de sus particularidades y características, elabore y presente su propio plan de riesgos laborales y no adopte otros ajenos. También ha indicado que la medidas sancionadoras pueden ser, en algunos casos, insuficientes y ha denunciado que algunos empresarios prefieren hacer frente al pago de las sanciones correspondientes que llevar a cabo medidas correctoras.

Además ha reclamado de la Inspección de Trabajo que acorte «los tiempos de intervención», desde que se produce el accidente laboral, se determinan las medidas correctoras y se hace la comprobación de que éstas se han hecho efectivas.

Sheila Mateos ha puesto de manifiesto que los accidentes de trabajo y su corrección existe una «responsabilidad compartida» pero que, en todo caso, el empresario es el que debe poner los medios para intentar que el accidente de trabajo no se produzca y al que hay que «concienciar» de que «un gasto en prevención es una inversión». La secretaria de CCOO ha advertido de que un 20 por ciento de los trabajadores que sufre un accidente laboral tiene un contrato en precario, generalmente de carácter temporal, por lo que ha pedido que sea un dato que se tenga en cuenta en los planes de riesgos.