Castilla y León rompe barreras en favor de las personas con autismo

En el día mundial de este trastorno psicológico, Simona Palacios advierte en LA RAZÓN que éste es ya un problema de salud pública de magnitud.

Castilla y León celebra hoy el Día Mundial del Autismo con numerosas actividades reivindicativas y de concienciación social sobre este trastorno psicológico -como la de ayer junto al Acueducto de Segovia, donde se batió el récord Guiness de parejas bailando jotas durante cinco minutos-, cuya prevalencia sigue creciendo cada año y afecta ya a uno de cada 68 niños que nacen.

«El autismo se ha convertido ya en un problema de salud pública de primera magnitud», señala a LA RAZÓN Simona Palacios, presidenta de la Federación de Asociaciones de Autismo en Castilla y León, quien reclama más medios para poder hacer frente no solo al aumento de los casos sino también a la variedad de los trastornos existentes y, sobre todo, poder ayudar a las familias de personas con autismo, con especial hincapié en las que tienen menos recursos y en los huérfanos.

«Rompamos juntos las barreras por el autismo. Hagamos una sociedad accesible» es el lema elegido para celebrar el día mundial de este trastorno que, en general, se sigue diagnosticando muy tarde, y ante el que muchos padres se sienten solos e incomprendidos. «El autismo no puede tratarse como si fuera una discapacidad», apunta Simona Palacios, quien llama la atención de las carencias formativas y de enseñanza reglada «que impiden que estas personas puedan tener mayor autonomía e igualdad de oportunidades». E insiste en la necesidad de que el Gobierno Herrera ponga en marcha una Estrategia Regional de Autismo que se dirija hacia una atención especializada.

Detección precoz

«Queremos que se cubran necesidades que ahora no se atienden y no depender del lugar en el que se nazca», señala la también responsable de la Asociación Autismo Burgos, para quien la detección precoz es vital para el desarrollo de las personas con autismo. «Si se trabaja desde edades tempranas hay muchas más posibilidades de que rompan esas barreras más sutiles que físicas a las que se enfrentan cada día, y tengan una vida más plena y autónoma».

Pese a la «falta de respuesta» por parte de la Junta esta Estrategia, Simona Palacios pone en valor algunos acuerdos a los que está llegando a nivel particular con Sanidad o Educación así como la disposición que ha encontrado entre los grupos parlamentarios de la oposición que van a llevar al Pleno de las Cortes una proposición no de Ley que demanda a la Junta esta estrategia específica para el autismo.

En materia sanitaria, destaca el proyecto «bbmiradas» que acaba de poner en marcha el Hospital Universitario de Burgos (HUBU), cuyos servicios de Pediatría y Atención Primaria comenzarán a partir de esta semana que entra a realizar consultas en colaboración con psicólogos a niños de entre dos meses y tres años, a los que analizarán su mirada y cómo responden ante varios estímulos visuales y, así, detectar precozmente el autismo.

Un proyecto pionero en España y que permitirá a Burgos liderar en nuestro país la recogida de datos y avanzar en el diagnóstico precoz del TEA (trastorno del espectro autista) para cambiar el pronóstico de los afectados y ofrecerles más oportunidades de integración social.

Además, el HUBU ha sido el primer hospital en incluir un protocolo de actuación para estos pacientes. Un equipo de Autismo Burgos y del centro hospitalario han elaborado una guía médica, reconocida en los Premios Enfermería en Desarrollo, que ayuda a las personas con autismo y familiares a hacer frente al clima hostil que les genera un hospital, agilizando los tiempos de espera o utilizando una sala que denominan de desensibilización, con menos iluminación e insonorización, y con pictogramas con los que puedan comunicarse, para generar confianza y que esté cómodos.