Castilla y León

Herrera apela al compromiso empresarial para mantener y acrecentar el empleo

El presidente insiste, ante los conflictos de Made y Siemensa, en que la Junta apuesta por salvar, entre todos, la capacidad productiva

Herrera durante uno de sus cara a cara que mantuvo en las Cortes con los líderes de laoposición
Herrera durante uno de sus cara a cara que mantuvo en las Cortes con los líderes de laoposiciónlarazon

El cierre anunciado por la empresa Isowat Made para su planta de la localidad vallisoletana de Medina del Campo, que deja en el aire 98 empleos, acaparaba el protagonismo del pleno de las Cortes celebrado ayer, con presencia en la tribuna de invitados de varios trabajadores de la empresa.

Para empezar, el Parlamento autonómico mostraba su solidaridad con los trabajadores a través de una declaración institucional, apoyada por todos los grupos, que defiende la continuidad de la fábrica y el mantenimiento del empleo; destaca su historia -lleva funcionando desde 1940- así como implantación nacional e internacional, con presencia en 40 países.

Además, el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, en su respuesta a la pregunta del procurador de IU, José Sarrión, sobre las gestiones que está haciendo el Gobierno regional ante este cierre y otros como el de Siemens Gamesa, en Miranda de Ebro, insistía en que la apuesta de su Gobierno es la de mantener la capacidad productiva y los puestos de trabajo. «Hay alternativas y, en último extremo, tanto si se trata de un problema de financiación como de competitividad, debemos entre todos trabajar para buscar otros propietarios y otros proyectos industriales», decía Herrera, a la vez que apelaba al compromiso de los empresarios con la tierra, como «clave» para poder reconducir cualquier crisis empresarial que surja así como a trabajadores que antepongan la supervivencia de los proyectos a sus condiciones laborales.

Antes, en su réplica, José Sarrión reprochaba al presidente el «fracaso» de algunas de las gestiones llevadas a cabo por el Ejecutivo para evitar cierres, y pedía más intervención pública y más «determinación» a la Junta ante el «capitalismo globalizado» para evitar deslocalizaciones y que los trabajadores «sea considerados como meras piezas de recambio». En su dúplica, Herrera admitía algunos «fracasos» en las gestiones que no evitaron cierres empresariales, pero destacaba más los éxitos y el buen hacer a través del Diálogo Social y de la Fundación Anclaje, como herramienta dispuesta para tal fin.

Al respecto, el presidente ponía como ejemplo lo que ocurría con Renault hace apenas diez años, «donde había más que fantasmas de deslocalización pero se pudo reconducir gracias sobre todo al compromiso de los trabajadores».

También valoraba positivamente la labor realizada para salvar otras empresas «y de manera rápida» como Seda Solubles, Trapa, Dulciora, Hibramer, Embutidos Rodríguez, Antibióticos, Campofrío, o más recientemente Ornua.

“No se puede jugar con el pan de cien familias”

Decenas de trabajadores de la fábrica de Isowat Made se concentraban en las Cortes poco antes del Pleno para denunciar la «falta de sutileza» de la empresa «por no dar la cara y mandar un abogado a negociar», y anunciar que no van a arrojar la toalla y que se van a movilizar para tratar de reconducir la situación. «No se puede jugar con el pan de cien familias», decía a LA RAZÓN José Ángel Escobar, del comité de empresa, para quien Made tiene carga de trabajo y culpa de la situación a la mala gestión realizada por la empresa.