El cáncer de pulmón genera ya mayor mortalidad que el de mama

Hace algo más de 20 años ya, media Barcelona andaba locamente enamorada del cruce de piernas de Sharon Stone en «Instinto Básico» y la otra mitad jugaba a imitar sus formas, también a seducir con un pitillo. Eran los años 90, se fumaba en las discotecas y en los aviones. También dentro de un coche cargado con niños sin sillas de seguridad. Fumar no era sólo cosa de hombres, empezaba a ser de mujeres. Y aunque las muertes de dos divas por cáncer de pulmón como Bette Davis o Joan Crawford avisaban ya de lo malo que era el tabaco, en los paquetes todavía no se decía nada. Entonces, el cáncer más temible de pecho. No en vano, hasta 2014, era la primera causa de muerte prematura entre las mujeres de Barcelona. Lo que pasa a partir de 2015, el último año del que se tienen datos sobre de qué mueren los barceloneses, es que el cáncer de pulmón desbanca al de mama como primera causa de muerte entre las barcelonesas. Es uno de los datos más impactantes del informe «La Salud en Barcelona 2016», que ayer presentó la teniente de Derechos Sociales, Laia Ortiz.

Años de tabaquismo

La gerente de la Agencia de Salud Pública de Barcelona, Carme Borrell, y la comisionada de Salud del Ayuntamiento de Barcelona, Gemma Tarafa, subrayaron que estos casos de cáncer son de mujeres que empezaron a fumar en los últimos 20 años y que también desciende la mortalidad por cáncer de pecho, gracias a las campañas de detección precoz. Ahora que se conoce que el tabaco mata toca aplicar aquello que decía el doctor de la televisión: «Más vale prevenir que curar».

Las siguientes causas de muerte prematura entre mujeres fueron los suicidios, el cáncer de intestino grueso y el de ovario.

Los hombres siguen muriendo antes de tiempo por culpa del cáncer de pulmón. Pero como lo saben desde hace años, pese a mantenerse a la cabeza de causas de muerte prematura, esto es antes de los 70 años, ha disminuido su incidencia. Igual que las enfermedades isquémicas, segunda causa de muerte. En cambio, han aumentado las muertes por accidente de tráfico, que por primera vez superan las cirrosis u otras enfermedades del hígado.

La buena noticia es que «morimos más de viejos que antes».