El Govern quiere abrir un expediente al mosso de “¡La República no existe!”

El agente de la policía catalana podría ser suspendido de empleo y sueldo de 1 a 14 días

La conselleria de Interior, comandada por Miquel Buch, ya tiene el castigo para el agente de los Mossos d'Esquadra que espetó “¡La República no existe, idiota!”. La unidad de Asuntos Internos del cuerpo policial catalán, encargada de estas cuestiones, considera que la actuación del mosso es una “falta leve” y plantea hasta tres tipos de penas: la pérdida de su puesto de trabajo en la Brimo (Brigadas Móviles) -sería probablemente desplazado a la unidad de seguridad ciudadana-; una amonestación por escrito -no conllevaría consecuencias concretas-; o, la suspensión de empleo y sueldo entre 1 y 14 días.

El mosso tiene ahora diez días para presentar alegaciones -probablemente las presente a lo largo de la semana que viene- y fuentes de su entorno aseguran a este diario que serán “contundentes” -su abogado es José María Fuster-Fabra-. El caso, más allá del castigo que pueda acabar conllevando, también puede desatar una nueva crisis en el seno del cuerpo policial. En este sentido, las mismas fuentes, que le definen como un agente muy alejado de toda la controversia política, relatan que cuenta con el apoyo de todos los mandos de brigada y aseguran que una sanción puede disparar un “malestar emergente dentro de las Brimo y las Arro”, las dos unidades antidisturbios de la policía catalana, en el ojo del huracán por sus actuaciones para contener las movilizaciones independentistas durante los últimos meses.

En el seno del cuerpo policial catalán hay multitud de voces discordantes con el posible castigo que se pueda aplicar al agente, que consideran un “tema completamente político”. Para ello se acogen también a la actitud del manifestante al que se dirigió, un agente rural de la Generalitat: el manifestante iba con la indumentaria de agente rural, lo que, a juicio de algunos miembros de la policía catalana, también podría implicar hasta un delito de “usurpación de cargo público”, algo por lo que también piden que se le investigue y expediente.

Asimismo, desde la Generalitat argumentan que la sanción sería consecuencia del insulto -”idiota”-. El incidente se produjo durante la manifestación independentista durante el Consejo de Ministros del 21 de diciembre.