El Govern quiere llevar a Europa la inhabilitación de sus políticos

Los exiguos resultados que han cosechado los independentistas en la internacionalización de su causa parecen haber obligado a repensar la estrategia.

Los exiguos resultados que han cosechado los independentistas en la internacionalización de su causa parecen haber obligado a repensar la estrategia. El nuevo planteamiento pasa ahora por proyectar en el mundo la «judicialización del proceso catalán y la persecución de altos cargos electos», según explicó ayer el secretario general del Diplocat, Albert Royo, en una entrevista en Europa Press.

Royo expuso que el plan consiste en que sean los propios afectados por causas judiciales quienes den a conocer su situación a «personas del exterior». Para ello, confirmó que ya cuentan con la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, y están tanteando al ex presidente de la Generalitat, Artur Mas, así como a ex consellers, diputados, concejales y alcaldes. El representante del Diplocat justificó que el nuevo rumbo que quieren dar para explicarse al mundo se debe a que han intentado «convencer a las instituciones españolas de que esta no es la vía» –en alusión a la «judicialización de la política»– y frente a ello «la manera de intentar pararlo es hacerle subir los colores al Estado denunciando esto a nivel internacional».

Todo ello llega días después de que el proyecto de autodeterminación catalán recibiera un revés en sus aspiraciones diplomáticas al comprobar que el Tribunal Constitucional de Alemania dictaminó que Baviera no tiene derecho a celebrar un referéndum de independencia porque su secesión vulneraría la Ley Fundamental del país germano. Cabe añadir la abierta unanimidad de todos los mandatarios internacionales al posicionarse a favor de la «unidad» de España –Obama, Merkel o Juncker– y la discreta recepción que han tenido los promotores del «procès» allí donde han estado –Puigdemont no consiguió verse con ningún miembro del ejecutivo de la UE cuando estuvo en Bruselas–.

Pese a ello, Royo aseguró que continuarán con los esfuerzos por seguir promocionando sus demandas en distintos parlamentos del mundo. Las dos últimas visitas a hemiciclos que han hecho no dejaron indiferente anadie. La más reciente fue una invitación en Finlandia, donde el conseller de Exteriores, Raül Romeva, junto a Royo fueron recibidos por el Partido Finlandés –una fuerza de extrema derecha–, y no por el parlamento finlandés, tal y como explicó después el Govern. Antes, en septiembre, Romeva ya había mantenido un encuentro en Estados Unidos con un diputado y miembro del Tea Party.