Munté descarta la idea de la CUP y de ERC de subir el IRPF a las rentas altas

La portavoz del Govern mantiene que el ejecutivo no ha abordado el debate que divide a Esquerra y CDC

Una semana más, la portavoz del Govern, Neus Munté, se vio en el aprieto de defender que el ejecutivo catalán, con convergentes y republicanos, es una piña. Aunque el vicepresidente económico, Oriol Junqueras, estudie la idea de subir el IRPF a quienes ingresan más de 90.000 euros para compensar una rebaja a las rentas bajas y el convergente Francesc Homs le reproche que abra un debate «sin hablarlo con el Govern». Además, no satisfecho con regañarle en público, Homs apostilló que «no hay margen para subir impuestos».

Pero pese al revuelo mediático que han generado estas diferencias, una semana más, Munté aseguró que la reunión del ejecutivo de Carles Puigdemont obvió el debate. «No se ha tratado ninguna propuesta de incremento del IRPF en el Consejo Ejecutivo», insistió la portavoz. Y eso que la CUP, con quien Puigdemont cuenta para sacar adelante los presupuestos, se ha aliado con ERC y exige que se eleve la presión fiscal a quienes ingresan más de 90.000 euros, entre otras medidas, para apoyar las cuentas.

Sin respuesta a la CUP

Además de una rebaja del IRPF para las rentas bajas y medias, que en Cataluña soportan la presión fiscal más elevada de toda España, la CUP reclama recuperar sucesiones y donaciones, tal y como estaba en la época del tripartito, e incorporar en las cuentas impuestos suspendidos por el Tribunal Constitucional, previo recurso del Gobierno. Pese a que por delante queda una ardua negociación para sacar adelante las cuentas, el Govern no habló de ninguna de las propuestas de la CUP, según Munté, que se limitó a repetir la tesis de CDC, su partido, que defiende que «no habrá subida del IRPF».

La portavoz del gobierno catalán actuó como a quien le gusta ver el vaso medio lleno y se centró en los puntos que por ahora comparten con la CUP, «una estructura tributaria más justa y equitativa», a partir de la cual Junts pel Sí quiere tejer un acuerdo.

Pero para tejer un acuerdo, primero ha de ponerse de acuerdo la coalición. La polémica propuesta de incrementar el IRPF a las rentas más altas ha generado discrepancias entre CDC y ERC, más visibles con la precampaña del 26-J como telón de fondo. Las diferencias entre convergentes y republicanos son tales que se ha abierto el escenario de que no lleguen a un acuerdo para sacar adelante los presupuestos y Puigdemont se vea empujado a adelantar elecciones en otoño. Munté trató de borrar esta idea del debate político. Por ahora, «no nos planteamos otros escenarios que no sean la aprobación de los presupuestos», aseguró. Incluso, puso fecha para el pleno de los presupuestos, el 8 de junio, días antes de que empiece la campaña electoral del 26-J.

La portavoz del gobierno catalán quiso insistir en la idea de que president de la Generalitat trabaja con el objetivo de dejar a Cataluña alas puertas de la independencia tras una legislatura de 18 meses.

Mientras Munté sudaba para intentar vender que el gobierno catalán no anda dividido y que por ahora no tiene previsto subir el IRPF, Puigdemont, en un acto ante 200 empresarios en Sabadell pidió «una mirada más amplia en materia fiscal», porque «hay medidas que pueden parecer negativas y generan controversia pero que al final se demuestra que son buenas». Con esta reflexión, que puede leerse como que el president abre la puerta a estudiar una subida del IRPF, respondía al presidente de la Fundación para la Industria, del Gremio de Fabricantes de Sabadell, Josep Bombardó sobre el debate del IRPF.

Avanza el calendario de las cuentas para enterrar el debate

Para no dar combustible a la tesis de que Carles Puigdemont podría avanzar elecciones este otoño si ERC y CDC no llegan a un acuerdo para aprobar los presupuestos, la portavoz del gobierno catalán, Neus Munté, desplegó ayer el calendario presupuestario. La mejor prueba de que convergentes y republicanos han enterrado sus diferencias acerca subir o no el IRPF a las rentas altas para compensar una rebaja a las rentas inferiores a los 30.000 euros es su propuesta presupuestaria conjunta. Munté avanzó que si no hay sobresalto, el Govern aprobará el anteproyecto de ley el próximo 24 de mayo.

Si se cumple este calendario, la Mesa del Parlament plantea avanzar el pleno de los días 15 y 16 de junio para hacer el debate sobre la totalidad de los presupuestos, a los días 8 y 9 de junio. De esta manera éste no coincidiría con la campaña de las elecciones generales del 26 de junio.

De celebrarse el debate el 8 y 9 de junio, el 13 del mismo mes empezarían ya los debates en comisión parlamentaria. Si este calendario provisional se cumple, Cataluña podría tener nuevos presupuestos los días 20 y 21 de julio, días en los que se podría convocar el pleno final.

Por mucho que se adelante el calendario, el debate está contaminado por la campaña. Ayer el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, se enfrentaba por un lado a empresarios que le pedían que no se tocara el IRPF de las rentas altas y por otro con CCOO que reclamaba lo contrario.