Alice Kellen, escritora: «Creo que el amor siempre es bonito, en cada una de sus facetas»

Alice Kellen sigue encontrando en el pseudónimo la magia de aquel que prefiere que valoren su obra a su nombre. Esta valenciana acaba de publicar «Todo lo que nunca fuimos», novela que ya tiene segunda parte escrita y programada para salir al mercado. Atiende a LA RAZÓN aún abrumada por el éxito que en tan pocas semanas ha cosechado su título. Será porque sobre la muerte y el amor, que es lo más usual de la vida, siempre necesitamos aprender enfoques nuevos. Y Kellen, en «Todo lo que nunca fuimos», plantea ambos temas desde un prisma poco común.

-El amor nos hace añicos, pero también nos puede reconstruir.

-Yo creo que el amor tiene dos caras: puede ser maravilloso o de los peores momentos en la vida de alguien. De todos modos, yo creo que el amor siempre es bonito en cada una de sus facetas, ya que siempre te hace aprender. Es algo que trato en la novela. Empieza quizá de la manera más idealista; luego tiene su parte de amor más real, con sus cosas malas. Aquí es cuando uno se conoce también a sí mismo y analiza en qué puntos puede estar fallando. El amor, en definitiva, nos ayuda a reflexionar como seres individuales a todos.

-Pero ha querido tocar más temas fundamentales en la novela.

-El arranque de la novela es la pérdida y cómo la afrontamos hoy en día. Cómo influye el entorno según la cultura. Siempre he pensado que deberíamos ver la muerte de otra forma, de manera más positiva, pero sigue siendo un gran tabú. Cuando llega, nos sorprende.

-Cuando es lo único que tenemos asegurado.

-No sé, por ese motivo, por qué estamos tan verdes cuando nos toca de cerca.

-¿Hubo alguna inspiración a la hora de componer esta historia?¿O la ficción superó en este caso a la realidad?

-La ficción nunca supera a la realidad. Pero en las historias siempre vuelcas cuestiones personales. Es imposible no plasmar como autor lo que eres. Detalles del entorno acaban siempre impregnando las historias que escribes.

-La crítica destaca de usted el ritmo y la certeza de su vocabulario.

-Es muy subjetivo. Me gusta escribir muy sentido, muy emocional. Sonará a tópico, pero cuando un autor escribe algo de corazón, hay algo que se queda y transmite a través de la historia. Eso es lo que intento. No escribir por obligación, sino después de haberlo interiorizado bastante.

-Nunca había visto dos partes de una novela que salieran publicadas en tan poco espacio de tiempo.

-Es una decisión editorial. Yo creo que las hubiera sacado aún más próximas entre sí. Son libros que se leen muy rápido y de forma muy fluida. Me gusta que salgan seguidas, se vive el proyecto de manera más intensa. Y para los lectores, por supuesto, es mejor.

-¿Son novelas independientes?

-Se puede leer la primera y tomarla como final, es una opción. Pero la historia continua con los mismos personajes. La intención no era hacer una bilogía, sino una novela. El corte ha sido temporal y muy definido, pero la historia sigue.

El libro

«Todo lo que nunca fuimos» es la primera parte de la bilogía «Deja que ocurra». En la novela, Kellen plantea una inusual historia de amor que parte de una pérdida irreparable. El color y la ilusión retornaran a la vida de Leah, la protagonista. La segunda parte de esta obra, «Todo lo que somos juntos», se publicará el 30 de abril de 2019.