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Valencia

Condenados a dos y tres años por el trasplante ilegal del hígado de su hijo

El paciente, de origen libanés, buscó comprar un hígado entre gente sin recursos, y al no conseguirlo, se trasplantó el de un hijo suyo

El hígado que finalmente le fue trasplantado al paciente no reunía, inicialmente, los requisitos necesarios para ser seleccionado
El hígado que finalmente le fue trasplantado al paciente no reunía, inicialmente, los requisitos necesarios para ser seleccionadolarazon

El paciente, de origen libanés, buscó comprar un hígado entre gente sin recursos, y al no conseguirlo, se trasplantó el de un hijo suyo

La sección Segunda de la Audiencia de Valencia ha condenado a dos años de prisión a tres de los cuatro acusados por un trasplante ilegal de órganos. El cuarto de los acusados, y receptor del hígado que le fue donado por un hijo suyo, ha sido condenado a un año.

La Fiscalía y los acusados alcanzaron ayer una conformidad antes de la celebración de la vista. Los cuatro aceptaron las condenas acusados de un delito de promoción, favorecimiento o facilitación de trasplante ilegal de órganos humanos ajenos.

Además del trasplantado, los otros condenados son su hijo, su sobrino y un colaborador.

Los hechos se remontan a 2013 cuando el ciudadano de origen libanés Hatem Akkouche, aquejado de una enfermedad hepática que requería trasplante de hígado y sabedor del prestigio de esta cirugía en España, decidió contactar con familiares suyos residentes aquí a fin de que realicen gestiones para encontrar donantes vivos, según el fiscal.

Los procesados empezaron a reclutar, entre abril y mayo de 2013 , posibles donantes y contactaron con personas sin recursos con el fin de que mediante precio accedieran a donar parte de su hígado al ahora condenado.

Finalmente, al no encontrar personas que quisieran asumir el riesgo o que fueran admitidas en el Hospital Clínico de Barcelona, que detectó irregularidades en supuestos donantes, se hizo una nueva prueba al hijo del procesado Hatem Arkkouche y, pese a que, según las pruebas realizadas en el Líbano que indicaban que su hígado era pequeño y que no podía ser donante de su padre fue evaluado y, viendo que era posible el trasplante, se realizó el mismo el 26 de agosto de 2013.

La Policía de Valencia detectó que, en una clínica privada de Valencia, los procesados estaban sufragando pruebas analíticas de compatibilidad con posibles donantes que estaban reclutando.