«El Consell tiene en la UVI a la Comunidad Valenciana»

–Esta semana comienza en Les Corts el debate sobre Política general ¿Cómo ve la situación en la Comunitat?

–Después de un año de gobiernos del cambio creo que el PP será capaz de hacer un discurso que ponga de manifiesto la realidad de lo que ocurre: el señor Puig y la señora Oltra tienen en la UVI a la Comunitat Valenciana, por su incapacidad de gestión y su enfretamiento con todo y con todos

–¿Piensa que el Consell es victimista?

–Total y absolutamente. Yo no les conozco otra característica, además de poco trabajador. En su primer año de Gobierno han tenido unas largas vacaciones que se unen a su incapacidad de gestión y a su victimismo. Todo el día llorando y lamentándose sin aportar absolutamente nada real. Solo proyectos que ya tenía el PP o vuelta a aquellas ideas que ya defendimos y que ellos han demonizado, como los grandes proyectos, que ya hemos visto que quieren recuperar, o el turismo, en fin...

-¿Cuáles son las propuestas que su partido va a plantear en el debate con el presidente Puig?

- No lo voy a desvelar todo (ríe) por no adelantar. Lo que queremos es hacer una radiografía real de cómo está la Comunidad Valenciana y después exponer nuestro programa. Porque el PP ha cometido errores, pero ha hecho muchísimas cosas. Por la educación pública por la sanidad pública, por el bienestar de la gente, por las infraestructuras de esta Comunitat, por la vertebración de nuestro territorio y sobre todo vamos a poner el enfásis en que se miren en el espejo, que son Gobierno. Hecho que todavía no han asumido. ¡Claro, en el caso del PSPV, tienen los peores resultados elctorales de su historia! No han interiorizado que llevan Gobernando desde hace quince meses. Vamos a ponerles delante del espejo.

–Qué opina el PP sobre la gestión que hace Compromís en el Consell?

–De una inexperiencia total y absoluta y de sectarismo.

–¿Y sobre las políticas del conseller Vicent Marzà?

–Si hay un ejemplo claro de sectarismo, esas son las políticas de Marzà. Pero no queremos focalizar solo en él. El conseller de Educación tiene una vicepresidenta, Mónica Oltra y un presidente, Ximo Puig. Y en estos momentos, ambos, especialmente el Partido Socialista, está avalando el sectarismo de una política basada en el enfrentamietno de todos los que no opinan como ellos y en el desprecio a una parte importantísima de la ciudadanía valenciana. Sobre eso no se puede construir absolutamente nada. Ellos han llegado al poder y han olvidado que un Gobierno debe gobernar para todos, no solo para unos pocos. Esa es la falta de experiencia de Compromís.

–En alguna ocasión Isabel Bonig ha tendido puentes a los socialistas para hablar de pactos

–Yo ya le he declarado mi amor al señor Puig muchas veces, pero parece ser que no me quiere. Prefiere a otra mujer. A la radical de la señora Oltra. Bromas aparte, yo creo que esta Comunidad está en una situación difícil. Y nosotros que hemos estado en el Gobierno lo sabemos. Por eso creo ques es necesario un acuerdo en cuatro o cico cosas fundamentales en un momento decisivo para la Comunidad Valenciana y para España, Y aquí está. Para que Puig se sienta libre de ataduras y suelte lastre respecto a los radicales y sectarios de Compromís.

–Cuando los miembros del Consell achacan todos los problemas de la Comunitat a la herencia recibida del PP, ¿qué piensa?

–En algunas cosas tienen razón, porque hemos cometido errores y lo hemos pagado en las urnas, pero a pesar de eso somos el único partido que lo ha reconocido. Pienso que más allá del rencor al PP y de su objetivo de echarlo de las instituciones, no tienen proyecto. Porque uno no puede estar continuamente echando la culpa al pasado. Tiene que vivir el presente y , sobre todo, diseñar el futuro, ilusionar a la gente. Eso es lo que no hacen, porque su único proyecto era tirar al Partido Popular. Pero ya llevan quince meses gobernando y el argumento se les va a acabar pronto. La gente te vota y formas Gobierno para solucionar problemas. Los ciudadanos no quieren que sus políticos, que su presidente y su vicepresidenta, se pasen el día llorando y lamentádose. El ciudadano quiere ver lo que se le ofrece. Oltra ya ha hecho un Presupuesto en 2016 y prefiere regalarle 310.000 euros a Raimon, gastarse lo que no está en los escritos en publicidad, o 34.000 euros en un vídeo que lo único que pretende es atacar al PP que, si ha gobernado 20 años es porque los valencianos así lo han elegido. Prefiere atacar a la libertad de los padres a la hora de elegir el tipo de educación que quieren para sus hijos, paralizar proyectos que generan empleo y riqueza por cuestiones sectarias. Todo eso tiene su reflejo en los Presupuestos. Oltra puede aludir a la herencia recibida, pero habrá que recordarle que tiene 100 recomendaciones del Síndic de Greuges que no atiende, lo cual es un hecho insólito en la historia de la Comunidad Valenciana. Tiene a 38.000 dependientes que siguen esperando cobrar, y ella decide donde llevar el dinero. Prefiere tener ocho asesores más, que cuestan 350.000 euros, en lugar de dos como tenía el PP, a destinar ese dinero a los dependientes. En política hay que priorizar y el Consell ya ha dicho cuales son sus prioridades. Menos quejas y más gestión.

–En los últimos días hemos visto imágenes terribles sobre el abandono en la atención a los mayores en la residencia pública de Carlet. La Conselleria encargada de los Servicios Sociales está buscando a la persona que tomó la imagen para depurar responsabilidades. Incluso se ha «invitado» a su director a dimitir.

–Por esa regla de tres también deberíamos echarle la culpa a la persona que realizó la fotografía de los niños refugiados sirios que llegan a las costas del Mediterráneo en pateras y que la señora Oltra ha utilizado en sus ruedas de prensa. Una cosa es el debate ético sobre si se deben publicar o no ese tipo de fotos, que debería aplicarse en todos los casos. Lo que queda claro ahora es que cuando perjudican a la consellera es malísimo y cuando le beneficia, las utilizaba en camisetas. Nosotros le pedimos responsabilidad, porque estos incidentes llevan produciendose mucho tiempo y no ha hecho nada para solucionarlos hasta ahora que se ha publicado la fotografía. Me pregunto por qué no ha destinado más presupuesto a mejorar las condiciones en la residencia de Carlet. Creemos que el dinero para pagar a sus ocho asesores, podrían haber ido a contratar más personal en esa residencia. Le recomiendo que esté menos en los platós de televisión y que gestione más.

–La financiación es un problema para la Comunitat. ¿Qúe opina el PP y de qué manera se puede salir de esta crisis?

– El Gobierno del PP tomó medidas. Hizo una gran reestructuración del sector público empresarial y de la Generalitat para ajustar el presupuesto a la realidad económica. Ahora nos encontramos con que el Consell del «Titanic» lo único que quiere hacer es aumentar la Administración sin decir de donde va a sacar todo ese dinero. Si no pueden mantener lo que hay, ¿de dónde va a salir? Yo le voy a contestar. De una subida generalizada de los impuestos a los valencianos, que vamos a pagar los caprichos y las adhesiones políticas de estos Gobiernos del cambio. Hay que colocar a Podemos, a Compromís y al PSPV. El PP vienen denunciando la falta de financiación desde que en 2009 el Gobierno de Zapatero aprobó un sistema que no tenía en cuenta el millón más de habitantes de la Comunidad Valenciana. Entonces los socialistas afirmaban que el modelo era bueno y que ponía fin a la falta de financiación a la que estábamos sometidos. Y Mónica Oltra decía que la deuda de la Generalitat era debida al despilfarro. Hoy sabemos, porque lo dice el Síndic de Comptes y lo reconoce la vicepresidenta, que el problema no es de gastos, sino de ingresos. El 90 por ciento de la deuda es por falta de financiación y solo un 10 proviene de obras, que ellos puede considerar un despilfarro, pero que se han hecho en todos los sitios y por todos los Gobiernos y ahí están.

–¿Qué le transmiten los empresarios?

–Que hay un Consell absolutamente paralizado y maniatado por los sectarios de Compromís y su falta de gestión y responsabilidad. Hay una gran preocupación por la falta de oportunidades que se están perdiendo en la Comunidad en un momento en que el aire viene a favor.

–¿Y los ciudadanos?

–Empiezan a ver la cara oculta de este tripartito. Muchos les votaron porque entendían que se podían cambiar las cosas. Después de quince meses hay un cabreo importante en sanidad, en educación... En menos de un año de Gobierno han tenido a más de 250.000 personas manifestándose en la calle contra sus políticas. Prometieron el paraiso en la tierra y si nos descuidamos no habrá ni tierra.

–¿Cúales son los frentes más importantes en los que actuar?

–Indudablemente la política económica, porque hay que crear empleo para sostener los servicios públicos, que no se podrán mantener arruinando al sector privado. Hay que acabar con el sectarismo enfocado a controlar a la gente y a hacer ciudadanos de pensamiento único, sin libertad para decidir. Esta ideología es la que está detrás de todas las decisiones adoptadas en el Consell por los miembros de Compromís. Hay que darle a la gente libertad. Concepto que lleva siempre la izquierda en sus discursos pero que practica muy poco.

-¿Va a apoyar los Presupuestos en los que se incluyen los 1.300 millones «reivindicativos»?

–No. Porque es una irrresponsabilidad al reflejarlos también en los gastos.