Ministerio de Justicia
La defensa de Blasco alega indefensión y pide unir las dos piezas de la causa
Piden la expulsión de la acusación de la Generalitat por haber sido antes defensores
Valencia- El juicio por el denominado caso Cooperación comenzó ayer en el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valencia, después de más de tres años de instrucción.
Nueve imputados se sentaron en el banquillo, entre ellos el exconseller y ex portavoz parlamentario «popular» Rafael Blasco. Junto a él, el empresario César Augusto Tauroni, encarcelado por esta causa, así como los exsubsecretarios de Sanidad, Alejandro Catalá; el ex director general de Cooperación, Josep María Felip; el ex jefe de Gabinete de Blasco, Xavier Llopis, y los funcionarios Marc Llinares y Tina Sanjuan. También, el presidente de la Fundación Cyes, Marcial López, y Josefa Cervera, trabajadora de la fundación. Los delitos que se dilucidarán son los de tráfico de influencias, falsedad, prevaricación, malversación y fraude.
La defensa de Rafael Blasco, ejercida por el prestigioso letrado Javier Boix, alegó en las cuestiones previas la indefensión de su representado ya que se le acusa de delitos, como el de falsedad, por los que no ha declarado y «no cabe que se abra juicio oral contra un imputado que no ha declarado en fase de instrucción».
Calificó la acusación de «sorpresiva» y las imputaciones de «falsarias», y dijo que éstas nunca se le han dirigido a Blasco.
La imputación del delito de falsedad en documento público, por el que tanto Blasco como Felip, Catalá y Llopis no fueron informados ni interrogados, fue cuestión previa planteada por las cuatro defensas citadas.
Boix explicó que «en nuestro ordenamiento no existe el imputado de hechos futuros» que en su opinión es la figura creada por la magistrada Pía Calderón con su instrucción.
También pidió la retroacción de las actuaciones hasta el momento en que se separa la causa en dos piezas, y la unión de ambas «para no incurrir en sentencias contradictorias» y porque «los delitos conexos han de juzgarse en un solo proceso».
Por su parte, la defensa de Tauroni alegó que la instructora Pía Calderón «ha vulnerado el principio de imparcialidad y ha buscado su culpabilidad».
La Fiscalía Anticorrupción pide 14 años de cárcel para Blasco, mientras que la acusación de la Generalitat pide once y medio. El resto de penas van de cuatro a trece años de prisión y de inhabilitación.
Tan sólo la familia de Tauroni
Ayer sobraba sitio en la Sala donde se vio la primera sesión del juicio del conocido como caso Cooperación o caso Blasco. Tan sólo ocho personas constituían el público de la Sala y tres eran familiares de Tauroni, que besaron al preso cuando acabó la sesión. La hija de Josep María Felip también acompañó a su padre hasta la Sala pero no entró.
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