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4.500 euros por viajar en la calesa de Hoffmann

El Teatro Real vendió ayer por 35.000 euros 200 piezas de los montajes más espectaculares que han pasado por su escenario

La calesa de «Los Cuentos de Hoffmann» tenía uno de los precios de salida más elevados , 3.800 euros
La calesa de «Los Cuentos de Hoffmann» tenía uno de los precios de salida más elevados , 3.800 euroslarazon

A pesar de que cuando se estrenó no recibió las mejores críticas, «Los cuentos de Hoffmann» resultó ayer la favorita del público de El Teatro Real. La calesa tirada por la cabeza de un caballo de la ópera de Offenbach, que el fallecido Gerard Mortier dejó como testamento, fue el objeto más codiciado de la subasta que por segunda vez se organizó en el Teatro. Quizas por su simbología o por el gusto por los carruajes de época, la calesa ya partía como favorita con un precio de salida de 3.800 euros que durante la puja se elevaron hasta los 4.500 euros. Era la segunda edición de «La Almoneda del Real» que volvió a permitir al público adquirir piezas exclusivas de utilería, sastrería y caracterización realizadas en los talleres del Teatro y que han formado parte de algunas de las producciones que han pasado por su escenario.

En total se vendieron 200 lotes de los 289 (con cerca de 400 artículos) que fueron expuestos para la puja en la que se recaudaron algo más de 35.000 euros.

A excepción de la calesa, los trajes –como los de «Cyrano de Bergerac»– y los tocados –como los de «Los Cuentos de Hoffmann»– tuvieron en lineas generales más exito que el «atrezzo» de los títulos que cedieron a la subasta sus artículos más significativos, como «La italiana en Argel», «Giulio Cesare», «La página en blanco» o «La Dolores»

Además de las llamativas pelucas de «El sueño de una noche de verano», confeccionadas pelo a pelo en los talleres de El Real, o los tocados y peinetas diseñados por nombres como Jesús del Pozo, la subasta contaba con vestidos únicos rescatados de anticuarios o trajes de época confeccionados con técnicas tradicionales completan esta muestra de objetos irrepetibles entre los que también podía pujarse por elementos de las producciones infantiles como «Bastián y Bastiana» y «El pequeño deshollinador».