Carmena justifica sus vacaciones de lujo: dice que «compartió gastos»

«De vuelta a Cibeles, trabajando en todo lo que tenemos pendiente y ocupándonos de lo que le importa a la gente de Madrid». Con esta frase, acompañada de la imagen de una reunión con dos de sus colaboradores en uno de los despachos del Ayuntamiento de Madrid, daba ayer a mediodía por terminadas sus vacaciones estivales la alcaldesa a través de Twitter. En su portada de ayer LA RAZÓN informaba de que Manuela Carmena, que a través del mismo canal se despedía de los madrileños el pasado 7 de agosto con un «me tomo unos días de descanso sabiendo que @Madrid queda en buenas manos: un gran equipo de profesionales municipales. Disfrutad el verano», había pasado sus vacaciones en una exclusiva urbanización cerca de Zahara de los Atunes.

Acompañada de su familia, la alcaldesa se ha alojado en una villa de la urbanización Atlanterra, una de las más lujosas y caras de las costas españolas. Según la información a la que tuvo acceso este diario, los Leira-Carmena han podido relajarse una semana en una casa –Villa Isbila– a apenas 70 metros de la playa y con acceso directo a la misma, jardín con barbacoa, porche y también piscina privada. En Twitter de nuevo, la regidora aclaraba este lunes que han estado «8 personas en la casa compartiendo descanso y gastos». Fuentes de su gabinete confirmaban la estancia de la alcaldesa en la «milla de oro» de la costa gaditana y realizaban algunas puntualizaciones: fue, aseguraron, la hija de Manuela Carmena quien cerró el contrato de arrendamiento de Villa Isbila –cuyo precio a la semana ronda los 3.800 euros– y en la vivienda se han alojado no sólo la alcaldesa y su marido, sino también su hija y su hijo (con a sus respectivas parejas e hijos), y otra persona más del círculo íntimo de la regidora. Juntos, y con gastos compartidos, según la alcaldesa, han disfrutado de una casa de cuatro habitaciones con vistas a la costa y a la montaña repartidas en dos plantas, dos baños, dos terrazas, un pequeño solarium y tres plazas de garaje a las que se puede acceder desde la vivienda con un ascensor. La urbanización en la que la familia de la «número 1» de Ahora Madrid se ha tomado unos días de descanso tiene también piscinas comunes, campos de golf, canchas de tenis y cuenta con servicio de niñera. Cada uno de los adultos ha pagado por sus vacaciones 633 euros porque, según la alcaldesa, los gastos de la vivienda correspondientes a sus nietos se han dividido entre todos los «mayores». Además, las fuentes municipales añadieron «por transparencia» que la regidora viajó hasta Cádiz en el coche de su hija y volvió ayer en tren con un billete que también pagó de su bolsillo. Al parecer, es la primera vez que la familia viaja hasta Zahara de los Atunes. En estas vacaciones, concluyeron, Carmena no ha contado con los servicios de su escolta: «No se han usado recursos públicos».

Las reacciones a los paseos matutinos de Carmena por «la punta de los alemanes» y en concreto su estancia en la vivienda de lujo de Atlanterra, en cuyos alrededores ha podido disfrutar recogiendo flores o tomando el sol fueron ayer criticadas por el Grupo Popular en el Ayuntamiento de Madrid. El concejal «popular» de la capital Fernando Martínez Vidal criticó la doble moral de la líder de Ahora Madrid, de quien aseguró que lleva «de retiro vacacional» desde que asumió el cargo el pasado 13 de junio. Aunque reconoció que «la alcaldesa puede gastarse su dinero como quiera», puntualizó que «una situación de crisis en la que muchos madrileños no han podido irse de vacaciones, un cargo público tiene que ser ejemplar en su conducta». «Llama la atención la doble moral de la izquierda radical que dice una cosa y hace la contraria, sobre todo en el caso de Manuela Carmena tras conocerse que su marido dejó sin pagar a los trabajadores de su empresa», añadió Martínez Vidal, quien consideró que en sus tres meses como alcaldesa «las únicas iniciativas que ha adoptado Carmena se refieren a dar edificios públicos a los okupas, a considerar su programa electoral como un conjunto de sugerencias o, por ejemplo, a anunciar la creación de cooperativas de madres para limpiar colegios e institutos públicos, a crear una web para desmentir a los periodistas y a rectificar a sus concejales todos los días por sus ocurrencias».

Desde Ahora Madrid, partido al que representa Carmena, no dudaron sin embargo en justificar la elección de su líder a la hora de tomarse unos días de vacaciones familiares en la exclusiva urbanización Atlanterra. En tono irónico la formación comentó ayer en Twitter que entienden que para este diario «el escándalo es que @Manuela Carmena se pague las vacaciones de su bolsillo» sin que «la invite ningún “lobby”». Asimismo añadieron, acompañando el mensaje de algunos recortes de prensa, que «está bien que las #VacacionesCarmenaEP despierten interés, pero el #Trabajo Carmena le importa más a la ciudadanía». «No sé si ir mandando los nombres de los hostales de estas opulentas vacaciones», se jactaba al respecto desde su perfil el concejal podemita Jorge García Castaño.

Sobre las vacaciones gaditanas de Carmena también fue preguntada ayer la presidenta regional. Cristina Cifuentes, que no se irá en este mes porque dice tener mucho trabajo pendiente y «muchas cuestiones» en las que ponerse «al día». «Yo no puedo opinar, todo el mundo tiene derecho a cogerse vacaciones con carácter general», declaró sobre ese asunto. «La alcaldesa se ha marchado y de eso no creo que deba decir nada, mas allá que desearle que pase unas muy felices vacaciones», comentó la presidenta regional.

LA RAZÓN intentó ayer ponerse en contacto con los concejales del Grupo Municipal Socialista de la capital pero ninguno estaba disponible para hacer un comentario sobre las vacaciones de Manuela Carmena. «Están de vacaciones», es la única respuesta que obtuvo este diario de su gabinete de prensa,desde donde no quisieron entrar en este asunto. El pasado 15 de agosto la portavoz socialista, Purificación Causapié, reivindicó en los tracionales actos de la virgen de La Paloma, de los que se ausentó la alcaldesa, que las instituciones están para ayudar a las personas que en determinadas ocasiones necesitan ayuda.

Aunque durante prácticamente todos los días de su descanso en Atlanterra han preferido comer y cenar en casa, el matrimonio Leira-Carmena, acompañado por sus nietos, decidió poner el domingo un punto y final a sus vacaciones cenando atún de Almadraba en el Restaurante Ramón Pipi de Zahara, informa GTres.

A su llegada a la capital, primer contratiempo: visita a unos vecinos desalojados de sus viviendas por peligro de derrumbe del edificio en el que vivían, situado en el número 1 de la calle Amalia, esquina con el número 336 de la calle Bravo Murillo. Cuando la fachada se resquebrajó, sus 43 vecinos tuvieron que abandonarlo.

De las vacaciones, me habría gustado que un periódico serio como La Razón preguntase: 8 personas en la casa compartiendo descanso y gastos.