Partidos Políticos
Zoido hace un frente común con PSOE e IU para tratar de salvar las Atarazanas
Más vale proyectos en mano que Caixafórum volando. El alcalde, Juan Ignacio Zoido, analizará, junto a los portavoces de PSOE, Juan Espadas, e IU, Antonio Rodrigo Torrijos, en una reunión con CaixaBank los proyectos que la entidad financiera catalana tiene en la ciudad.
El portavoz del PP, Juan Bueno, explicó el principal acuerdo adoptado en el, según la oposición, encuentro «sorpresivo» mantenido a tres bandas con el Caixafórum y su traslado a la Torre Pelli como telón de fondo. Bueno argumentó que La Caixa cuenta con proyectos «importantes» que «se van a poner encima de la mesa», recogió Europa Press. «Lo suyo sería llegar a un acuerdo entre todos para enfilar el acuerdo del camino de esos proyectos para Sevilla», indicó, con los intereses de la capital «por encima» de los de índole política. «El proyecto en las Atarazanas es un buen proyecto y queremos que no se pierda. Si La Caixa tiene argumentos para pensar lo contrario, los expondrá con todas las partes, pero nuestro esfuerzo será para que hagan el menor agravio posible a Sevilla», manifestó.
Juan Espadas apostó por la «unidad» y por «no tirar la toalla hasta el final». «No nos resignamos a que alguien diga me voy y sólo se responda 'Sí y amén' y no se rechiste». En la reunión convocada por Zoido se tratará de «hacer reflexionar a La Caixa sobre el perjuicio que genera a la ciudad y el que sin duda también se genera a sí misma abandonando el proyecto en las Atarazanas», sin eludir la responsabilidad de la Administración andaluza. «Si en los astilleros medievales no se desarrolla el Caixafórum habrá que replantearse qué hay allí, lo que corresponde en primer lugar a la Junta», dijo.
«Hemos convenido la necesidad de solicitar un encuentro con La Caixa en el que la Corporación en Pleno discutamos mediante orden del día su papel en la ciudad», resumió el portavoz de IU. «No podemos ni debemos institucionalmente legitimar cualquier fuga o huida de los compromisos con la ciudad», dijo Torrijos. «Está obligada a cumplir su convenio. No puede absorber la capacidad de ahorro de los sevillanos y convertirse prácticamente en el más importante centro financiero de la ciudad y no absorber los compromisos que tenía Cajasol», argumentó. «Hay un hito muy negativo: la foto famosa del alcalde como santificación de una objetiva derrota». Torrijos subrayó el «riesgo de que prevalezca el interés particular sobre el general» y «la responsabilidad de la Junta de exigir el cumplimiento del convenio», aunque «el Ayuntamiento tiene mucho que decir en cuanto a licencias» y –recordó– «los sevillanos en su mayoría tienen sus depósitos en La Caixa», lo que podría utilizarse como contrapeso.
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