El hospital de Ifema se apaga

La presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, el vicepresidente regional, Ignacio Aguado, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, la vicealcaldesa de la capital, Begoña Villacís y el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero han encabezado la lista de autoridades que esta mañana han presidido el acto solemne de clausura del hospital de Ifema. Ha sido una mañana llena de emociones en la que no han faltado las muestras de agradecimiento entre todos los que han hecho posible que el “hospital milagro” funcionase a pleno rendimiento durante 40 días. En ese tiempo han pasado por él casi 4.000 pacientes, de los cuales más del 99 por ciento han recibido el alta.

Ayuso ha presidido la comitiva que ha recorrido todos los pabellones de la Feria de Madrid que se han visto implicados en esta actividad sanitaria frenética. El personal sanitario ha aplaudido, ha celebrado y sobre todo ha reivindicado el papel de la atención primaria en esta crisis, muchas veces la gran olvidada, y que ha compuesto la gran mayoría del equipo que ha cuidado de los pacientes en Ifema.

En su turno de palabra, la presidenta regional ha puesto en valor el trabajo de todos los que han sido partícipes, desde los más de mil profesionales sanitarios hasta el personal de limpieza, “héroes anónimos que han hecho que no haya más contagios”. “Ifema es un símbolo de vida, un ejemplo de lo que los españoles somos capaces de hacer cuando trabajamos juntos. Es el hospital de los hospitales”, ha subrayado, y ha añadido que ya es un símbolo más de Madrid.

Por su parte, Almeida ha querido tener un recuerdo cariñoso para todos los fallecidos que ha dejado y aún deja tras de sí la pandemia. “No debemos olvidar a nuestros muertos. Deben estar siempre presentes, deben ser el recuerdo sobre el que construir una sociedad mejor”, ha afirmado. En cuanto a Ifema, “ha vuelto a escribir una página brillante en sus 40 años de historia", ha subrayado, y ha recalcado que siempre será “el símbolo de la esperanza, de la no rendición ante la pandemia”.

Las tres últimas pacientes abandonaron el recinto en silla de ruedas y entre lágrimas, sin parar de dar las gracias a los sanitarios. Estos, a su vez, les dedicaron aplausos y gritos de “campeonas”, a la vez que les pidieron que se siguieran cuidando en su domicilio. Una de ellas portaba una de las mascarillas decoradas con un gran sonrisa que los sanitarios les regalaron ayer.

Un emocionado Antonio Zapatero, director médico del hospital de Ifema, hizo balance en su intervención de los 40 días de lucha, poniendo en valor el trabajo de todos los que se han afanado en que todo saliera adelante lo mejor posible. “Es la primera vez que hemos trabajado juntos, hombro con hombro, o como se dice ahora, codo con codo. Habéis dado un gran ejemplo que nunca se olvidará”, ha dicho, y, entre lágrimas, también se ha acordado del Ejército y los voluntarios. Se acordó también de los cantos de ópera, de los aplausos, de la biblioteca “Resistiré” y de los bailes, un conjunto que ha denominado “espíritu Ifema”. Pero, sin duda, el mayor respeto lo ha dedicado a los pacientes. Su intervención ha estado seguida de un largo aplauso.