Eugenia Carballedo, consejera de presidencia de la CAM.@Cipriano Pastrano

Eugenia Carballedo: «Sánchez no ha hecho otra cosa que fallar a Madrid. Ha sido feroz»

La consejera de Presidencia de Madrid cree que «el interés en perjudicarnos es ideológico. Gracias a Ayuso, Aguado y Vox, la ultraizquierda no toma decisiones aquí»

La número tres del Gobierno de Díaz Ayuso analiza con LA RAZÓN este año de gestión frente a la pandemia. Se muestra optimista de cara a la aprobación de los presupuestos y descarta un escenario de adelanto electoral.

–¿Deben celebrarse manifestaciones el próximo 8-M?

–No estamos para manifestación alguna. En Madrid ya tuvimos la desgracia de padecer una manifestación el 8 de marzo de 2020 que más que el Día de la Mujer, como dijo la presidenta Díaz Ayuso, fue el Día de la Mujer contagiada. Parece mentira que algunos no hayan aprendido. Si estamos pidiendo a los madrileños que no se reúnan en los domicilios con no convivientes, ¿cómo vamos a entender que es buena ocasión para una manifestación de 500 o 100 personas? Nuestros técnicos y expertos, porque nosotros sí los tenemos, han emitido informes desfavorables y así lo conoce el delegado del Gobierno.

–¿Cómo es posible que este debate y otros errores regresen tras lo vivido en este año?

–Como el error mayúsculo de seguir teniendo el aeropuerto de Barajas sin control, que está trayendo mucho enfermedad y mucha muerte a Madrid. Son errores en los que insiste en caer el Gobierno de Sánchez. Me parece de una profunda irresponsabilidad, me preocupa y me inquieta. Desde el Gobierno regional no ha sido un año en blanco: contamos con un nuevo hospital público, insistimos en el uso de mascarillas de alta calidad, estamos realizando test masivos y analizando las aguas residuales y vacunando ahora a los madrileños... no hemos hecho otra cosa que aprender de hacia dónde va el covid y, por eso, hemos podido mantener una actividad económica y un empleo mejor que en el resto de España. Lamentablemente otros están desaprendiendo y así lo demuestra el hecho de que haya quien se anime a convocar a la calle a centenares de personas. Deberían pedir perdón y callar.

–¿Ha fallado el presidente Sánchez a Madrid?

–No ha hecho otra cosa que fallar y dar la espalda a Madrid y al interés de los madrileños. No se me ocurre ningún adjetivo favorable. No hemos sentido ningún apoyo. Desde el minuto uno de la pandemia ha sido feroz la oposición a cualquier medida que queríamos adoptar. Es verdad que luego el tiempo nos ha dado la razón y han tenido que desdecirse, por ejemplo, con el hospital de Ifema, que ha sido replicado en otros países y que, sin embargo, en nuestro país el Gobierno de España no hizo otra cosa que criticarlo como hace ahora con el Zendal, en el que los pacientes, por estar todo pensado para la pandemia, tienen una estancia menor. Fuera de España somos ejemplo de cómo gestionar el covid, pero en España no es así. A los empresarios, autónomos y pymes, Sánchez no hace otra cosa que perjudicarles, porque amenaza con subir los impuestos. Anuncia ayudas que no se concretan en nada, genera expectativas en personas que están en situación de extrema vulnerabilidad.

–En la salida de la crisis, Madrid jugará un papel fundamental. ¿Que interés puede tener Sánchez en perjudicar a Madrid si eso va en contra del conjunto del país?

–El interés es ideológico. Él está gobernando con los populistas de ultraizquierda y con los votos de independentistas y bilduetarras; y gracias al Gobieno que la presidenta Ayuso ha conformado con el vicepresidente Aguado y ayudados por los votos de Vox esto está impidiendo que la ultraizquierda esté en las instituciones madrileñas tomando decisiones.

–¿Qué errores ha cometido el Gobierno de Ayuso en la gestión sanitaria?

–Seguro que hemos cometido errores. Voy a reconocer uno que es obvio y que ha sido definitivo. Fuimos los primeros, con todo el Gobierno de España enfrente, en tomar una decisión para controlar el virus: el 9 de marzo en un Consejo de Gobierno a las cinco de la tarde, la presidenta nos dijo que era necesario suspender la actividad docente en los colegios y las universidades y que había que pedir a los madrileños que trabajasen desde casa. Ojalá lo hubiéramos hecho el 30 de enero y reaccionado antes.

–¿Qué imagen se le viene a la cabeza de forma recurrente del peor momento que haya vivido este año?

–La morgue fue definitiva para mí. Que tuviéramos que encontrar espacios para llevar a personas que no pudieron superar el virus. Fue muy complicado. También recuerdo que pasamos muy malos momentos cuando el Gobierno de la nación decidió centralizar las compras del material necesario para atender a los pacientes y proteger a los sanitarios. Vimos que no había manera de que el Gobierno fuera capaz de comprar ese material. El primer avión que aterrizó en Madrid y que nos permitió tener respiradores y EPIs, luego vendrían otros 25 aviones, fue una imagen que compensó todos esos sinsabores.

–PP y Cs forman el primer Gobierno de coalición en Madrid. ¿Qué se da con más frecuencia: los debates internos o los episodios de descoordinación?

–Puedo dar una opinión, pero también hablar con hechos. Sólo en 2020, en el Consejo de Gobierno hemos acordado más de 2.400 asuntos, algunos con más debate y otros con menos. Como viceconsejera en un gobierno monocolor, he vivido que ahí había debate; y ahora como consejera en un Gobierno de coalición, he de decir que tenemos una relación personal excelente, también entre los viceconsejeros y los directores generales técnicos. Tenemos debates políticos enriquecedores y a veces no pensamos lo mismo. Lamento si en ocasiones trasladamos una imagen de descoordinación.

–Una vez superada la pandemia, ¿es descartable al 100% un adelanto electoral?

–No he hablado con la presidenta en ningún momento de un adelanto electoral. Tenemos unos compromisos con los madrileños para llevarlos a efecto y necesitamos tiempo. Me refiero al Arco Verde, Nuevo Norte, el Plan Vive, la digitalización de la sanidad, la educación y la propia administración... ahora mismo no estoy con el elemento del anticipo electoral en mi día a día.

–Llevan 20 meses gobernando sin presupuestos nuevos. ¿Puede considerarse un fracaso?

–Estamos con los presupuestos prorrogados...y estamos hace ya tiempo trabajando en una ley de presupuestos para 2021. No hay motivo para desconfiar en que esta ley no va a ver la luz. Y para ello hay que apelar a los diputados de la Asamblea de Madrid.

–¿Es optimista entonces?

–Soy optimista porque hemos trabajado mucho en esto. Cuando uno se esfuerza y entiende a la persona con la que quiere llegar a acuerdos, finalmente se consigue. Las conversaciones siguen en marcha sobre el fondo del asunto y van avanzando.

–Se perciben en el PP dos formas de relacionarse con Vox. Por un lado, Ayuso les reconoce como socio preferente y, por otro, Casado mantiene una postura de mayor confrontación. ¿Cuál es la posición más adecuada?

–Nuestra relación con Vox en Madrid es la de un socio preferente porque gracias a sus 12 votos podemos conformar este Gobierno. En el ámbito nacional, ocurrió lo contrario: Vox planteó una moción de censura que el PP no podía compartir porque no hacía más que fortalecer la figura del señor Sánchez, que estaba encantado con aquello porque fue un espectáculo. Por eso, Casado adoptó esa posición. Nosotros sí compartimos que Vox Madrid entienda que Díaz Ayuso tiene que liderar este Gobierno.

La consejera, en su despacho@Cipriano Pastrano
La consejera, en su despacho@Cipriano PastranoCipriano Pastrano DelgadoLa Raz—n

–Vox presentó una iniciativa para reducir el número de diputados en Madrid. ¿Por qué el PP la ha rechazado cuando ustedes mismos formularon una propuesta similar en 2013?

–No ha sido una cuestión ni de fondo ni del Partido Popular. Esa iniciativa, que reformaba el Estatuto de Autonomía por un lado y la Ley de Gobierno por otro, era contraria al reglamento y fue el presidente de la Asamblea el que la tuvo que inadmitir porque había cuestiones que no cumplían los requisitos para ser admitida por la Mesa y su posterior tramitación. Nosotros presentamos esa iniciativa en 2013 y en la legislatura de Cifuentes también se trabajó en este ámbito de forma intensa.

–Entiendo, por tanto, que podrían llegar a un acuerdo de fondo para reducir el número de diputados.

–Todo lo que reforme el Estatuto de Autonomía requiere de una mayoría muy cualificada de modo que habría que hacer un trabajo previo para saber qué piensan los grupos parlamentarios.

–Es probable que Gabilondo abandone pronto la Asamblea para ser el nuevo Defensor del Pueblo. ¿Cómo valora que los responsables públicos, ya sucedió con Errejón, dejen la política madrileña a mitad de mandato?

–Son casos muy diferentes. El del señor Errejón es inaceptable. Le echaron de su partido, montó aquí lo que fuere, hizo una campañita en la que no habló de Madrid y cogió sus cosas y se fue. Nunca le interesó Madrid. Aquí nadie le conocía, sólo le conocíamos por el telediario. Utilizó la Asamblea para buscarse un hueco porque lo había perdido en Podemos. El señor Gabilondo lleva desde 2015 en la política madrileña, es el presidente del grupo parlamentario socialista y he de reconocer que el trabajo que hace es el de un responsable político en el ámbito democrático. Voy a lamentar su marcha porque es una persona con una gran experiencia.

–¿Cómo valora la forma en la que ejerce Más Madrid su labor de oposición?

–Es tan inaceptable cómo el que era su líder, el señor Errejón. Están en una oposición muy radical en el fondo y en la forma. No todos, pero sí los que más intervienen. Intentan desacreditar a la persona y a las siglas. Siempre dan lecciones de éticas y nos hemos enterado que su portavoz, Mónica García, ha estado cobrando un sobresueldo, más de 13.000 euros, de forma indebida. Espero que, además de disculparse, deje el escaño.