Dulces

San Isidro 2021: Tontas, listas o de Santa Clara, ¿cuáles son las rosquillas típicas de Madrid?

A diferencia de los dulces típicos de Semana Santa, las rosquillas tradicionales de la capital no se fríen, sino que se hornean

Las rosquillas de San Isidro es un dulce que es posible elaborar en casa
Las rosquillas de San Isidro tontas y listas son el dulce típico de la festividadGastroMadridGastronomía

Llega San Isidro, un día muy especial para los madrileños. En la capital, el 15 de mayo es típico ir a beber agua del santo en la ermita de San Isidro, pasear por la pradera vestidos de chulapos y chulapas, y merendar en el césped del parque que rodea la capilla del patrón de Madrid. Este año no habrá verbena en la pradera, ya que se traslada al recinto ferial de Ifema para asegurar el control del afroro y evitar la propagación del coronavirus, pero se mantendrán los tradicionales puestos con la gastronomía típica de las fiestas, como los entresillos, las gallinejas, los torraos, las garrapiñadas y, por supuesto, las famosas rosquillas.

Las rosquillas son un dulce típico de la Semana Santa, pero en Madrid es tradicional consumir las diferentes variedades que se elaboran en la zona durante la primera quincena de mayo. Quien haya pasado por la pradera de San Isidro seguro que se ha quedado impresionado con las montañas de rosquillas que se venden en los puestos de la feria. Listas, tontas, de Santa Clara o las francesas, son las más tradicionales, pero también se pueden encontrar dulces de diferentes sabores. ¿Cuál es la diferencia entre las rosquillas típicas de Madrid?

Rosquillas tontas

Las tontas son las que no llevan nada por encima, solo la masa de las rosquillas. A diferencia de las tradicionales que se comen en otros puntos de la geografía española, este tipo de dulces no son fritos, sino horneados. La masa de las rosquillas de San Isidro tradicional lleva harina, huevo, azucar, aceite y anís. Su acabado es tan simple que por eso se les llama tontas.

Rosquillas listas

Otra variedad un poco más elaborada son las listas. La masa es la misma que las de las rosquillas tontas y también se elaboran en el horno. Sin embargo, para el acabado final se prepara un glaseado que cubre la parte superior del dulce. La cobertura tradicional de esta variedad está hecha con azucar, huevo y zumo de limón.

Rosquillas de Santa Clara

Las rosquillas de Santa Clara son otra de las recetas típicas de la gastronomía madrileña en San Isidro. El modo de preparación es muy parecido al de las tontas y las listas, ya que la receta para la masa es la misma. En este caso, la cobertura es un merengue que se pone sobre la superficie de la rosquilla y se hornea para que se quede seco, como una corteza de nieve.

Rosquillas francesas

En el caso de las rosquillas francesas, la diferencia con el resto es que su cobertura es de almendras y azúcar glas. Su origen se remonta al siglo XVIII, cuando el cocinero de Fernando VI le preparó a Bárbara de Branganza esta receta para darle un poco más de sabor a las rosquillas tontas.