Oposición

Revuelta vecinal contra el cerrojazo de Navacerrada

Los afectados presentan alegaciones: perjudicará a la economía y alentará el vandalismo

Imagen del estado de las instalaciones de la estación de Navacerrada
Imagen del estado de las instalaciones de la estación de NavacerradaPABLO MARTINEFE

«Se acabó lo que se daba (o no...)», podía leerse en el comunicado que emitía el Puerto de Navacerrada el pasado 31 de marzo. Era su forma de informar de que se cerraba la temporada de esquí. Pero su desmantelamiento está previsto en octubre próximo. La decisión del Organismo Autónomo de Parques Nacionales (OAPN) de no renovar la concesión de los terrenos en Segovia, donde se ubican las pistas de El Bosque, El Escaparate y El Telégrafo pone en serias dificultades de supervivencia de la actividad en el Puerto de Navacerrada y las opciones que se manejan para revitalizar la zona los vecinos no la consideran una solución viable. De hecho, se ha formado un movimiento social #SalvemosesquíNavacerrada, integrado por vecinos de la zona, profesores, trabajadores de la hostelería, del comercio local, deportistas...que quiere frenar el cierre y creen que el Programa de Activación Económica Sostenible del Puerto de Navacerrada, elaborado por el Organismo Autónomo Parques Nacionales (OAPN), dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica no resuelve la situación.

Después de estudiar cada uno de los cuatro ejes del plan, son muchas las quejas pero hay dos por encima de todas: no se ha contactado con los colectivos implicados y siguen sin conocerse las «razones políticas» que hay detrás de las intenciones de desmantelamiento de la estación, tal y como aseguran.

¿Cuál va a ser el impacto económico? El movimiento ciudadano cree que el plan no da ninguna solución concreta para las más de 230 familias que van a ver sus empleos afectados de forma directa o indirecta por el cierre de la estación. Además, consideran que la decisión de no renovar la concesión «supone el cierre definitivo de la estación de esquí, y la pérdida de cientos de puestos de trabajo en toda la zona, por lo que es una medida que afecta directamente y de forma negativa a toda la economía local».

Y es que piensan que precisamente ha sido la estación de esquí lo que hace que el puerto de Navacerrada siga vivo. «Es un centro de actividad económica, deportiva y de turismo sostenible para municipios tanto de Segovia como de la Comunidad de Madrid y el cierre de la estación será un duro golpe a decenas de municipios, sobre todo durante el invierno, que es cuando menos turistas y visitantes acuden a la sierra. Esto agravará la ya de por sí complicada situación económica de los pequeños municipios rurales, provocando el cierre de la hostelería, restauración, comercios, etc».

¿Y cómo afectaría a la movilidad sostenible? También hay quejas de los ciudadanos en este ámbito ya que opinan que las propuestas del OAPN para mejorar la movilidad «no son eficaces». Creen que los problemas de tráfico no se deben a la estación de esquí, sino al elevado tráfico en la carretera que une Madrid con Segovia y a un semáforo que ralentiza la circulación». De ahí que consideren que podrían arbitrarse otras medidas sin que eso implique necesariamente cerrar la estación de esquí.

¿Y cómo afectaría al turismo histórico, de deporte y naturaleza? El OAPN propone desestacionalizar y diversificar la oferta turística. Sin embargo, el movimiento ciudadano cree que principalmente se concentrará el turismo en primavera y verano y ya no será una zona atractiva para visitar en invierno. «Los problemas de tráfico y masificación del uso público serán mayores. Además, la intención de promover iniciativas vinculadas al deporte y naturaleza es contradictorio, ya que con el cierre desaparecerán casi todas las escuelas de esquí y de otros deportes de nieve, afectando sobre todo a miles de niños que aprenden a esquiar en las pistas».

Vandalización

El movimiento ciudadano teme que la decisión de obligar a cerrar la estación derive en un abandono y la vandalización (graffitis, robos, okupación) de las instalaciones, como ya ha ocurrido con otros edificios en el puerto. «La actividad del esquí ha sido siempre sostenible y respetuosa con la conservación del entorno natural y social del puerto», subrayan.

«Decisión arbitraria»

La consejera de Medio Ambiente, Paloma Martín, también ha lamentado el cierre unilateral de las tres pistas de esquí de Navacerrada de la vertiente segoviana por parte del Gobierno central, en la medida en que afectará de manera indirecta a los empleos y al dinamismo económico y social de la zona de influencia madrileña. «Igual que hemos apoyado a la empresa concesionaria y a la Federación Madrileña de Deportes de Invierno, haremos lo mismo con aquellos ciudadanos que persigan revertir esta situación tan injusta e injustificada. No existen argumentos jurídicos, medioambientales, deportivos o económicos que justifiquen dicha medida».

Tampoco es válido para Martín el argumento esgrimido por el MITECO sobre el cambio climático porque «para tomar esta decisión llevaría a tener que cerrar entonces las 38 estaciones de esquí de España. Desde un punto de vista medioambiental, el Plan de Ordenación de la Sierra de Guadarrama que afecta a Madrid (PORN Madrid) recogía ya la existencia de pistas de esquí para que sus usos públicos (deporte de invierno) fueran compatibles con los usos medioambientales».

La consejera opina que la estación de esquí de Navacerrada, tiene una vertiente social muy importante, ya que «es una de las estaciones con precios más asequibles por lo que el cierre de las pistas perjudicará especialmente a las familias con recursos limitados. Es una decisión arbitraria sin argumentaciones reales».