Nueva vida
El Capricho se convertirá en un museo sobre la duquesa de Osuna y su tiempo
El Ayuntamiento de Madrid invertirá 2,3 millones de euros en una intervención que busca devolver el esplendor a un entorno palaciego único
El Palacio del Capricho se convertirá en un museo tras la aprobación de las obras de su rehabilitación final, con una inversión de 2,3 millones. Será dependiente del área de Cultura Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid y girará en torno a la figura de la duquesa de Osuna y su tiempo.
Así lo ha detallado este jueves la portavoz municipal y delegada de Emergencias y Seguridad, Inmaculada Sanz, después de que la Junta de Gobierno haya aprobado el contrato para llevar a cabo el proyecto de rehabilitación final de este espacio histórico tras las deficiencias y problemas derivados del proyecto anterior.
Según ha explicado la Sanz, el objeto del proyecto actual es el de finalizar la rehabilitación estructural y de la envolvente (cubiertas y fachadas) del Palacio del Capricho con un criterio de intervención que pretende devolver al edificio sus valores patrimoniales perdidos, permitiendo que exista una continuidad para la rehabilitación interior de las salas como museo.
La duquesa y el palacio
El edificio será un museo dependiente del área de Cultura, Turismo y Deporte, que girará en torno a la figura de la creadora del jardín del Capricho, la duquesa de Osuna, el propio jardín y su tiempo.
El estado actual, sobre el que se ha proyectado la reforma, es un edificio con una obra parcialmente ejecutada e interrumpida hace casi dos años, lo que ha supuesto la reconsideración de algunos sistemas constructivos y la imprescindible actualización de las instalaciones ya implementadas que han sufrido un lógico deterioro.
Se trata de trabajos complejos que requieren un nuevo proyecto y la revisión de todo lo existente para, con criterios de economía y de funcionalidad, rehabilitar el edificio para que el nuevo museo pueda implementarse una vez finalizadas las obras.
Un proyecto en dos fases
Con este planteamiento, se ha considerado técnicamente más conveniente la realización de la obra en dos fases. La primera asume fundamentalmente la parte constructiva, estructural y de cerramiento del edificio, de manera que garantice un contenedor estanco y seguro, así como todas las intervenciones necesarias en el exterior del edificio, incluyendo el Centro de Transformación.
La segunda fase asumirá los acabados interiores del inmueble y su adaptación como museo. Se ha calculado que el decalaje entre ambas fases podría ser de unos seis meses, de manera que mientras se encuentre en ejecución la primera fase, se podrán incorporar datos que faciliten la realización del proyecto de la segunda.
Estas obras conllevan una inversión municipal de 2,3 millones de euros para la fase 1, gasto ya aprobado por la Junta de Gobierno y el plazo de ejecución para esta primera parte es de 12 meses. El proyecto y la dirección de los trabajos se realiza por los arquitectos de la Dirección General de Patrimonio Cultural.