Elecciones

Miguel Durán lanza su candidatura al ICAM: “No nos debemos a ningún partido”

El ex director general de la ONCE promete un Colegio “independiente respecto a las fuerzas políticas” y reclama que se escuche la voz de la Abogacía en la tramitación de las leyes

El exdirector general de la ONCE, Miguel Durán (centro), en la presentación de su candidatura para presidir el ICAM
El exdirector general de la ONCE, Miguel Durán (centro), en la presentación de su candidatura para presidir el ICAMCEDIDA.CEDIDA.

Quiere un ICAM sin ataduras políticas, con presencia en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y con voz en la tramitación de las leyes. Promete racionalizar la administración del Colegio de Abogados de Madrid para exprimir la gestión del presupuesto para poder bajar las cuotas de los colegiados y anticipa que, si vence en las elecciones del próximo 20 de diciembre, será “incómodo” para el poder.

Todo eso, y mucho más, lo ha puesto sobre la mesa el abogado Miguel Durán, ex director general de la ONCE, en la presentación de su candidatura para sustituir a José María Alonso como decano del ICAM. Flanqueado por su número dos, el abogado y escritor Jesús Ángel Rojo, y por buena parte de los miembros de su lista -en la que figuran, entre otros, el exmagistrado del Tribunal Supremo Adolfo Prego, el abogado Santiago Milans del Bosch, el exfiscal de la Audiencia Nacional Ignacio Gordillo y el ex fiscal jefe de Madrid José Javier Polo-, Durán denunció la supuesta “manipulación” en el voto por correo en estos comicios (ha denunciado ante la comisión electoral a otro de los candidatos, Raúl Ochoa) e hizo un guiño al turno de oficio que, se quejó, “cobra poco y tarde”.

El letrado se comprometió a “dignificar” la Abogacía y garantizó que, si gana las elecciones, el ICAM que presida será “muy independiente respecto a las fuerzas políticas”. Y aunque no rehuyó la etiqueta de conservador, dejó claro que su candidatura no arrastra servidumbres: “Somos muy independientes y plurales. No nos debemos a ningún partido”.

Otras vías de financiación

Y aunque dijo no estar dispuesto a llegar al ICAM “con vocación de romper con todo”, Durán sí explicó que el presupuesto de la institución “bien administrado puede dar mucho de sí”, por lo que apostó por “introducir mucha racionalización” en la gestión de sus recursos. “El ICAM puede explorar otras vías de financiación y debe analizar la reducción de estructuras poco útiles”, señaló.

El ex director de la ONCE considera que el Colegio “no puede permanecer de perfil ante la tramitación de leyes que son esenciales, tanto las netamente ideológicas como las que tienen una mayor vocación de permanencia en el tiempo”. De ahí que defienda que el informe de la Abogacía “debe ser preceptivo” en su tramitación. “Los abogados tienen que estar también considerados como elementos esenciales a la hora de elaborar leyes”, recalcó.

El eje de su propuesta, destacó Durán, es “dignificar la figura del abogado” porque “sin abogado no hay justicia”, aunque -se quejó- “muchas veces no son justamente tratado por otros operadores de la justicia” (incluidos, dijo, los propios jueces).

Presencia en el CGPJ

En ese empeño, el letrado pretende “encontrar la manera de que pueda nombrarse a algún representante de la Abogacía para que forme parte de algunas comisiones de trabajo del Consejo General del Poder Judicial”. Un CGPJ al que también se refirió a raíz del “penoso espectáculo” de su renovación.

“Los políticos se ocupan de repartirse los cargos del Tribunal Constitucional y del Consejo, pero hasta ahora no han hecho nada por mejorar los tiempos de resolución de los pleitos en la Administración de Justicia”, aseguró. “Tenemos una Justicia que sigue tardando años en resolver los pleitos. Eso es una indecencia, clamorosamente injusto y dice muy poco del estado de derecho. Por eso me duele que desde la Abogacía se haya hecho tan poco para que eso mejore”.

“Queremos venir a servir, no a servirnos”, indicó antes de recoger el guante lanzado por una de las candidatas -Ángeles Chinarro- de que todos los aspirantes a presidir el ICAM hagan públicos sus gastos de campaña y la procedencia de la financiación. “Lo vamos a tener muy fácil, porque vamos a gastar poco”, ironizó antes de detallar una campaña low cost de “ocho o diez mil euros, como mucho”.

Defensa del turno de oficio

Respecto a uno de los pilares de su programa, la defensa del turno de oficio (al que se refiere como su “máxima preocupación”), Durán aseguró que a los abogados de oficio “se les obliga a trabajar con una retribución muy baja que, además, se les paga muy tarde”. “Vamos a plantar cara a eso”, se comprometió.

Consciente del escaso eco que los comicios tienen en la participación, el abogado se fijó también como objetivo “impulsar la participación electoral” y apuntó que si preside el ICAM en las elecciones de 2027 la vía telemática está “garantizada” porque “hay medios tecnológicos suficientes”.

Además de Durán, otros seis candidatos se disputan la presidencia del ICAM: Eugenio Ribón, al frente de la plataforma «Compromiso Abogacía»; Raúl Ochoa; el candidato de “Ahora Abogacía” Juan Gonzalo Ospina (los tres han formado de la actual Junta del Colegio); Ángeles Chinarro, respaldada por la Asociación Libre de Abogados y Abogadas (ALA); Beatriz Saura y Begoña Trigo.