LGTBI

Más Madrid pone el foco en el "chemsex"

El "chemsex" ha crecido exponencialmente en los últimos años, aseguran, hasta convertirse en una de las principales preocupaciones en el seno del colectivo LGTBI

La mefedrona y el GHB, derivados de metanfetaminas, son dos de los estupefacientes más utilizados para practicar "chemsex"
La mefedrona y el GHB, derivados de metanfetaminas, son dos de los estupefacientes más utilizados para practicar "chemsex"La RazónLa Razón

Las diputadas de Más Madrid en la Asamblea Jimena González y Marta Carmona han registrado una batería de propuestas que buscan "combatir los efectos no deseados del 'chemsex' y favorecer la salud sexual del colectivo LGTBI", como llevar a cabo un estudio epidemiológico para valorar el alcance y prevalencia del fenómeno abordando la extensión de las complicaciones físicas y psicosociales y formación sanitaria especializada.

También programas de tratamiento y rehabilitación para personas con uso problemático de chemsex y drogas en la red de salud mental y adicciones. Más Madrid ha registrado una Proposición No de Ley que recoge estas medidas, al tiempo que el grupo político está trabajando en un programa transversal a nivel local, autonómico y estatal para promover estas medidas a los diferentes niveles competenciales.

Jimena González ha trasladado en un comunicado que el 'chemsex' "ha crecido exponencialmente en los últimos años hasta convertirse en una de las principales preocupaciones en el seno del colectivo LGTBI dadas las consecuencias negativas que está teniendo sobre las vidas y la salud de cada vez más personas".

Más Madrid ha alertado del "miedo a una nueva estigmatización como la que vivió el colectivo LGTBI durante la epidemia del VIH". "Tenemos que actuar ya, sin miedo, con decisión, guiados por criterios técnicos sociales y sanitarios y teniendo en cuenta todos los condicionantes que rodean este fenómeno. Lo que ya es inasumible es la inacción", ha subrayado la diputada.

Su compañera Marta Carmona ha incidido en "los errores cometidos en los años 80 y 90" y el aprendiza de "qué ocurre cuando la comunidad científica y las instituciones se ponen de lado ante una crisis de salud pública que comienza en torno a un colectivo, como el LGTBIQ: tiene que ser el propio colectivo el que de la voz de alarma, como está sucediendo actualmente".

Según datos del Área de Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid, los centros dedicados a la atención a la drogodependencia (CAD) alcanzaron durante 2022 hasta los 512 pacientes con problemáticas vinculadas al Chemsex, "multiplicando por diez la cifra de 2017".

Más Madrid insta por todo ello al Gobierno de la Comunidad de Madrid a poner en marcha medidas orientadas a la prevención de las consecuencias negativas de dicha práctica, mediante campañas de concienciación sobre sumisión química y agresiones en chemsex, y al cuidado de la salud sexual, entre otras cuestiones