Alcaldes de Madrid

Victorias Barderas, alcaldesa de Hoyo de Manzanares: «Hemos pasado de ser un pueblo de vivienda vacacional a primera residencia»

La regidora busca que los jóvenes se quede en el municipio con un objetivo máximo de unos 12.000 habitantes. En febrero, su gobierno con Vox perdió una concejala, pero mantienen la mayoría absoluta

Victoria Barderas Alcaldesa Hoyo de Manzanares
Victoria Barderas Alcaldesa Hoyo de Manzanares. David JarDavid JarFotógrafos

Victoria Barderas, de 53 años, solía veranear en el municipio madrileño de Hoyo de Manzanares (8973 habitantes). En esos viajes desde Pozuelo de Alarcón, donde nació y se crio, fue cuando se dio cuenta de la «carencia de servicios» que había en el pueblo. En 1999 se mudó definitivamente a Hoyo. «Formé parte de esas personas que veraneábamos y quisimos echar raíces aquí. Vimos la carencia de servicios. Veníamos de municipios cercanos en los que no podías permitirte comprar un piso y además nos gustaba la naturaleza», cuenta Barderas en un despacho del Ayuntamiento. Barderas estudió Publicidad y Relaciones Públicas y trabajó en diferentes radios, donde locutó asuntos relacionados con su pasión, los caballos. Pero su mayor experiencia laboral fueron los 18 años que estuvo en el Hipódromo de Madrid, ocupando diversos puestos de dirección. Comenzó su andadura en política en 2011 como concejala de cultura. Tras cuatro últimos años de un gobierno de izquierdas –PSOE, IU-Podemos y Unidos x Hoyo–, llegó a alcaldía en junio de 2023. El Partido Popular obtuvo 6 concejales de 13 en las elecciones de mayo del año pasado, pero llegó a un acuerdo de gobierno con Vox, que consiguió 2 concejales. «A pesar de poder gobernar en solitario, decidimos formar un equipo de gobierno más fuerte para recuperar de la agonía a un municipio devastado por el desgobierno de tres partidos», dice Barderas. A finales del mes de febrero, la número tres del PP, Ana María Lorenzo, abandonó el partido, pero no renunció al acta y pasó a ser concejala no adscrita y el equipo mantuvo la mayoría absoluta. La alcaldesa tiene como objetivo atraer a los jóvenes para alcanzar una población de unos 12.000 habitantes y «cuidar a los mayores», en un pueblo «con un entorno único, a 35 kilómetros de Madrid» que «ha pasado de ser vivienda vacacional a primera residencia»

¿Cómo valora el gobierno con Vox hasta el momento?

La valoración es muy positiva. Hemos conformado un equipo en el que prevalece la gestión ante las ideas. La número uno de Vox también viene de esa generación que se instauró aquí en Hoyo de Manzanares y también entiende que aquí debe primar la gestión y el servicio al ciudadano. Tenemos muy claro que los idearios de los partidos políticos hay que llevarlos a otro plano, no al plano de gestión diaria, y ahí tenemos plena libertad y respeto mutuo. Trabajamos en equipo y se demuestra con los logros que hemos conseguido hasta ahora. Por ejemplo, hemos sacado los presupuestos de 2024 en tiempo y forma, sin ningún tipo de fisura y estando de acuerdo por completo.

¿Qué situación se encontró cuando llegó a ser alcaldesa?

Cuando llegamos nos encontramos con unos presupuestos que eran del 2022 y que además ya no habían funcionado porque estaban hechos en función de la pandemia. El 40% del presupuesto del 2023 estaba ahogado con facturas del 2022. Cuando tomamos posesión el 17 de junio todo era: no se puede hacer, no hay dinero. Sí que es cierto que había 500.000 euros en el remanente de crédito que tuvimos que utilizar para el pago de facturas como las basuras no se pagaban desde el mes de enero. Había 25 contratos de luz distintos. Y lo que para mí fue más duro, que nos encontramos con una piscina averiada. Nadie nos dijo que esta perdía agua. Cuatro días antes de mi toma de posesión, el concejal del PSOE dio vía libre a abrir la piscina. Y en el mes de julio nos llegó una factura de 22.000 euros, cuando el agua de todo el municipio en un año, incluida la piscina, es de 44.000. Tuvimos que cerrar la piscina el 4 de agosto en plena ola de calor. Hoy ya estamos trabajando y la tendremos en marcha a mediados de junio como siempre.

Y en recursos humanos me encontré un déficit enorme en técnicos cualificados. No tengo secretario, no tengo arquitecto, no tengo tesorero. Me encontré una plantilla muy desmotivada, con una sobrecarga de trabajo importante.

¿Por qué se fue la concejala Ana María Lorenzo?

A la política se viene a trabajar, a darlo todo por los vecinos. Teníamos unos objetivos, una evaluación de desempeño de nuestra labor en la que yo exijo el 100% y hay que estar muy comprometido con los vecinos de Hoyo de Manzanares, y si uno no está comprometido y no está dándolo, tiene que revisar a qué ha venido a la política.

¿Su marcha va a afectar al Gobierno?

A nivel de equipo no nos afecta, seguimos siendo un equipo con mayoría y un equipo sólido. Incluso nos ha afianzado, ya que Vox adquirirá nuevas competencias dentro de la organización municipal y estamos muy contentos con la labor que estamos haciendo.

¿Cuáles son sus objetivos para estos cuatro años?

Primero, la atención al ciudadano. Cuando llegamos había cita previa hasta para hacer un empadronamiento. Por ello, hemos quitado la cita previa. También hemos quitado el teletrabajo. En un municipio, como hoyo de Manzanares, tan cercano a los vecinos, el teletrabajo no tenía ya sentido después de la pandemia. Hemos puesto una máquina digital a la entrada de Ayuntamiento para que los vecinos califiquen el servicio que les prestamos.

Otra cosa es incrementar los servicios a los jóvenes a la vez que cuidar de nuestros mayores y cerrar el ciclo de vida en Hoyo de Manzanares. En cuanto a jóvenes, hemos recuperado becas con universidades. Se están ampliando las actividades, cumpliendo también y apoyando el programa de la Comunidad de Madrid con el tema de salud mental para jóvenes con el tema de drogas. Para nuestros mayores estamos impulsando una residencia de ancianos, porque Hoyo tiene que tener una residencia, estamos en un entorno único.

¿Tiene dificultades el pueblo para que se queden los jóvenes?

Sí. Hemos pasado de ser segunda vivienda o vivienda vacacional a ser primera vivienda. Aquí lleva bastante tiempo sin construirse. Esto ha generado que el alquiler sea caro. Desde la pandemia, todo el mundo, con el tema del teletrabajo, se ha venido a vivir a municipios como el nuestro, que además de estar en un entorno privilegiado, estamos a 35 kilómetros de Madrid y a 7 minutos tienes Torrelodones, Las Rozas, Majadahonda. Eso ha hecho que nos convirtamos en un municipio de primera vivienda y ha disparado los precios. Las normas urbanísticas ahora contemplan parcelas de 1000 metros con chalets de 300 metros cuadrados. Esto no es viable. Incluso personas mayores están vendiendo porque quieren irse a casas más pequeñas. Ahora tenemos 8 unidades de actuación para vivienda. Nuestra propuesta de avance en ese Plan General que hemos hablado con la Comunidad de Madrid es que se contemple lo siguiente: conseguir que haya viviendas más pequeñas, que haya adosados y zona chalets. Es decir, zonas para los que empiezan, los que están haciendo familia y lo que quieren una vida más independiente. Esto va a ampliar la oferta y los precios se moderarán. Hoy hay jóvenes que encuentran alquileres más baratos en Torrelodones que en Hoyo de Manzanares. Y eso no puede pasar. El salto a los 10.000 habitantes sería interesante para Hoyo de Manzanares porque recibiríamos más prestaciones tanto del Estado como de la Comunidad Autónoma y podríamos llegar a tener servicios que ahora no nos corresponden, como por ejemplo que ahora somos ambulatorio, no centro de salud.