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Medio Ambiente

“En España está empezando a calar el consumo responsable en la alimentación”

La campaña “Pequeño como un gesto, inmenso como el mar” con motivo del Día Internacional de los Océanos pretende concienciar a los consumidores sobre la importancia de comprar pescado extraído de manera sostenible para preservar todas las especies y tener mares para siempre.

Marine Stewardship Council (MSC) es una organización internacional sin ánimo de lucro que establece una serie de estándares, mundialmente reconocidos, en materia de pesca sostenible y trazabilidad de productos pesqueros. Cuenta con un sello azul de pesca sostenible certificada y participa en la concienciación y sensibilización del problema de la sobrepesca así como en otros proyectos como el de Medfish para la mejorea del mar Mediterráneo. Hablamos con Laura Rodríguez Zugasti, Directora de MSC en España.

Este año con motivo del día internacional de los océanos habéis lanzado la campaña “Pequeño como un gesto, inmenso como el mar” ¿Cuál es el objetivo de la campaña?

Desde Marine Stewardship Council (MSC) queremos unirnos a esta celebración y poner el foco en el consumidor. El lema quiere decir que el gesto que hacemos cada uno de nosotros cuando vamos a comprar pescado y elegimos el que tiene el sello de MSC realmente está teniendo un impacto enorme, porque estamos contribuyendo a la pesca sostenible respaldando a todas aquellas pesquerías y empresas que están comprometidas con el respeto de los océanos, y estamos haciendo avanzar la sostenibilidad y el cuidado de los mares.

¿La decisión de un consumidor puede influir tanto en el funcionamiento de los océanos?

Bueno es una suma de cosas. Lo primero es que los pescadores tomen conciencia y empiecen a cambiar sus prácticas y a operar de una manera respetuosa con el medio ambiente; que las empresas, a la hora de hacer su aprovisionamiento, compren el pescado que viene de fuentes sostenibles certificadas; y una vez que eso está funcionando es cuando el papel del consumidor es crucial. Porque si el consumidor a la hora de comprar no valora los productos que tienen un valor añadido desde el punto de vista de sostenibilidad, entonces es muy difícil incentivar y motivar a que más pesquerías y empresas se unan. Por lo tanto es un papel fundamental, pero unido al papel que se hace a lo largo de toda la cadena.

¿Un consumidor en qué tiene que fijarse a la hora de comprar pescado?

En nuestro caso es un sello azul que pone pesca sostenible certificada MSC que se puede encontrar ya en muchos puntos de venta, sobre todo en cadenas de supermercados y también cada vez más en la restauración. Se puede encontrar tanto en congelados, como en conserva, como en frescos. Además de buscar el sello azul, hay otras cosas que se pueden hacer como fijarse en la información legal de los productos. En el pescado fresco tiene que poner la zona FAO de origen, el arte de pesca, la especie, si es de acuicultura o extractiva. La pesca es un sector muy complejo en cuanto a este tema porque la sostenibilidad en los océanos no es algo estático; estamos hablando de recursos que se ven afectados por múltiples factores como la sobrepesca, el cambio climático, factores ambientales que hacen que las poblaciones de peces se desplacen... por eso el sello es una herramienta para que de una manera sencilla el consumidor pueda reconocer que ese pescado ha sido auditado de manera independiente.

La sobrepesca es uno de los problemas de los océanos que queréis atajar ¿qué otros preocupan?

A día de hoy hay tres factores fundamentales que están ejerciendo una presión muy grande en los océanos: la sobrepesca, la contaminación marina y el cambio climático. En MSC estamos muy focalizados en la sobrepesca ya que nacimos hace 20 años para hacer frente a este problema. El cambio climático no lo trabajamos directamente, pero está muy relacionado con nuestra actividad, porque está influyendo en la distribución de las especies, y esto va a hacer que aquellas pesquerías mejor gestionadas se adapten mejor al cambio climático.

La pandemia del coronavirus que conlleva menos actividad pesquera ¿está influyendo para bien en los océanos?

Todavía es pronto para saber qué impacto ha tenido a nivel de los océanos. En el sector pesquero, por un lado, los barcos más pequeños han tenido dificultades para adaptarse a las medidas de salud y al distanciamiento social, y eso ha hecho que hayan tenido que retrasar, en algunos casos, los inicios de la campaña, o hayan tenido que quedarse en tierra. Por otra parte, el cierre de la hostelería ha afectado gravísimamente al sector pescado y ha hecho que caigan los precios. A nivel de la pesca internacional el mayor reto ha sido el de renovar las tripulaciones porque no había vuelos internacionales, y han tenido que hacer mareas más largas hasta poder renovar las tripulaciones. Ese descenso real que se ha dado especialmente en el sur de Europa no sabemos hasta qué punto luego va a tener un efecto en cuanto al estado de las poblaciones de los peces, pero lo que sí es muy importante es que la vuelta a la actividad, en el caso de la pesca, se haga manteniendo una visión de sostenibilidad, y no se intente compensar esa falta de actividad con pescar más en un plazo más corto.

Un estudio encargado por MSC y realizado por GlobeScan asegura que el 54% de los españoles ha cambiado sus hábitos de consumo de pescado para proteger los océanos ¿Este número es suficiente para que se produzca un cambio significativo?

Nos parece positivo, porque el consumidor ha tomado conciencia de la situación de los océanos y de que su consumo puede contribuir al sostenimiento de los océanos. Este dato nos indica que en España está empezando a calar el consumo responsable en la alimentación y en el pescado, que es un ámbito que todavía para nosotros es muy nuevo. Porque se plantea mas la sostenibilidad en el agua, en el transporte... pero no tanto en el pescado. Por eso es positivo, porque es una tendencia, y además es más acusada en los jóvenes y en la familia con hijos.

Otra de las preocupaciones de los consumidores según este estudio es la posible desaparición de algunas especies de peces en 2040 ¿Cuáles están en peligro de extinción actualmente?

Según los datos de la FAO, el 33% de las poblaciones de peces en el mundo están sobreexplotadas, esto significa que se está pescando más de lo que la población puede soportar, se está poniendo en peligro la recuperación de esas especies y que estén disponibles para el futuro. Los próximos datos de la FAO dirán si está remitiendo esta tendencia o no. Si pese a la conciencia que hay y al compromiso de las empresas no remite esta tendencia, es que no se está actuando con la aceleración suficiente. En MSC tenemos un enfoque positivo, es decir, no tanto de hacer una lista de especies a no consumir, sino de recalcar y destacar aquellas especies y pesquerías que están respetando la pesca sostenible, entendida como tres principios: que la especie esté en buen estado, que a la hora de pescar se haya minimizado el impacto en el ecosistema, y no se pongan en peligro otras especies o el fondo marino, y por último la gestión, que se tomen las decisiones adecuadas para evitar que se llegue a la sobrepesca y al agotamiento de las especies. Ahora hay ya mas de 300 pesquerías en el programa de MSC; en España está certificada la anchoa, el bonito y la sardina en el Cantábrico, el pulpo de Asturias, el bacalao del mar de Barents, el atún en el Índico y el atún claro en el Atlántico; y hay flota española certificada que representa en torno al 8% de las capturas de pesca en España.

¿Cuáles son los objetivos a medio y largo plazo en la lucha para la conservación de los océanos?

La agenda 2030 de Naciones Unidas de desarrollo sostenible, y en concreto el objetivo 14, que hace referencia a la vida marina. Una de las metas es que para el 2020 hay que acabar con la sobrepesca, la práctica de pesca destructiva y la pesca ilegal. La verdad es que vamos muy retrasados en conseguir estos objetivos, y lo que se está hablando es que ahora estamos en la década de la acción, es decir, lo que hagamos de 2020 a 2030 puede dar el cambio hacia otra manera de gestionar los océanos, o será continuar con el declive que nos va a enfrentar a una situación muy complicada en cuanto a los océanos.

Y en Europa también tenemos metas muy claras: una política pesquera común cuyo compromiso es que en 2020 todas las poblaciones de peces tienen que estar gestionadas a rendimiento máximo sostenible. Se pueda explotar y pescar, pero sin poner en peligro la sostenibilidad. En el Atlántico ha habido importantes avances, la sobrepesca se ha reducido, pero vamos retrasados. Yo creo que la dirección es correcta, pero el ritmo al que vamos es demasiado lento. Hay que dar un impulso para, de verdad, cambiar la situación.