Opinión

Los verdaderos valientes

En uno de los peores momentos del socialismo en España, Pedro Sánchez está a punto de ser presidente del gobierno gracias al apoyo del neocomunismo de Podemos y del independentismo de ERC, pero ello es posible como consecuencia de la división del centro derecha, algo que el socialismo español había pretendido desde la primera victoria del Partido Popular. Nada que objetar a la articulación de nuevos partidos, faltaría más, pero la situación es de urgencia política nacional. La mejor forma de querer a España es defenderla y se defiende con valentía, y no hay mayor valentía que ofrecer sacrificios de tu propia ideología, y como partido, de la propia estrategia política con el fin de sumar y ganar. Algunos no lo entendieron y creyeron que venían a sustituir y no a sumar, y no pudiendo sustituir tampoco quisieron sumar. Pablo Casado lo ofreció antes de las elecciones y no pudo ser, con España Suma hoy estaría conformado un Gobierno de este signo, pero no estamos para ucronías, sino para realidades, y la realidad es que ahora toca sumar de igual manera que en los gobiernos regionales como el de Madrid; porque también se puede sumar desde la oposición respetando agendas propias pero buscando fines y objetivos comunes, porque es más lo que une que lo que divide. Lo valiente no es guarecerse en el burladero ideológico y hacer exhibición de valores compartidos por muchos como si fueran propios y exclusivos, lo valiente es salir de ese burladero y ofrecer políticas que pueda apoyar una mayoría de ciudadanos para conformar un gobierno de centro derecha, eso sí que es valiente. Esta es la mejor forma de defender a España y a los españoles, la satisfacción de sus necesidades y su porvenir, no se puede hacer política solo para aquellos que piensan como tú, sino y también para los adversarios, y cuando menos para los que más se aproximan, y esto sí que es valiente. Por eso cuando algunos utilizan el calificativo de valiente o de cobarde para intenta diferenciar lo que no encuentra grandes disimilitudes entre los que te votan deberían hacer una reflexión sobre cómo se sirve mejor a tu país, sumando frente al real adversario o cavando trincheras inexistentes entre los que tenemos una forma muy similar de trabajar por España.