Política

La estrategia contra Mañueco

Hay mucho en juego y una victoria popular resulta perturbadora, como sucedió en Madrid

Las encuestas muestran una clara victoria de Mañueco en Castilla y León. Es verdad que hay que esperar al domingo, pero las perspectivas son buenas. La duda es ver si gobernará en solitario o dependerá de Vox. No incluyo el CIS, porque nadie se lo toma en serio. Es verdad que resulta muy útil para La Moncloa, ya que generará dudas a la vez que justifica titulares desfavorables para el PP. Nada le puede resultar más grato a la izquierda política y mediática. Hay que partir de la base de que la demoscopia no es infalible, aunque es muy llamativo cuando su resultado no es compartido por el conjunto de empresas que forman el sector. La excusa de las diferentes metodologías es inconsistente. Desde que comenzó la campaña se intenta vender que el PP no tendrá un buen resultado, a pesar de que las encuestas muestran todo lo contrario. No hay más que leer o escuchar la avalancha de declaraciones y opiniones que intentan justificar esa profecía en un intento desesperado por conseguir que se cumpla. La izquierda política y mediática no pudo conseguir sus objetivos contra Ayuso, aunque se esforzó mucho como todos recordamos, y ahora repite la estrategia en Castilla y León.

Las razones que explican esta situación son simples y se circunscriben a ese deseo de perjudicar al PP y Casado. Hay mucho en juego y una victoria popular resulta perturbadora, como sucedió en Madrid. El PSOE cosechó un fracaso impresionante convirtiéndose en la tercera fuerza, pero la capacidad propagandística de Moncloa es impresionante. El ciclo político beneficia a Casado, porque todo indica que las andaluzas revalidarán a Juan Manuel Moreno como presidente. A esto se une la previsión de unos resultados muy buenos en las autonómicas y municipales de 2023. Esta imagen de caballo ganador es desoladora para el PSOE. Por ello, los esfuerzos se destinan ahora a Castilla y León, con la idea de que la izquierda puede gobernar o que el PP dependerá de Vox. Es el eje de la campaña de Sánchez con la inestimable colaboración de los medios de comunicación que cuestionan el resultado de Mañueco, a pesar de sus propias encuestas, y critican a Casado. Es lo que sufrieron Aznar y Rajoy cuando estaban en la oposición.