Hoy, baño y masaje

En la actualidad apenas se informa de ello. Hace años, se consideraba noticia de interés. Se podía leer en cualquiera de los diarios deportivos. «Real Madrid. Hoy, baño y masaje». Don Santiago Bernabéu no era partidario de tantos cuidados. «En mis tiempos, nos bañábamos en nuestra casa y los masajes eran muy esporádicos. Estamos convirtiendo a los futbolistas en unas nenas». El tiempo no le ha dado la razón. El baño y el masaje son imprescindibles para que un deportista se mantenga en forma, siempre que el segundo, el masaje, sea estrictamente muscular, sin final feliz.

Era el día de la semana de la relajación, y al recuerdo me sumo. Hemos pasado días muy agitados con el guateque de Cataluña y merecemos el consuelo de la sonrisa. Las trampas no han superado a las castristas. En un «referéndum» de los que organizan los tiranos con obligación de acudir a votar, se produjeron resultados sorprendentes. Votaron dieciocho millones de cubanos, y de ellos, dieciocho millones y medio dijeron que sí. En Cataluña, muchos han votado en diferentes colegios electorales. Sin un censo fiable es facilísimo. Por Internet, los usuarios de cualquier parte del mundo podían acceder a una papeleta electrónica. Se lo advierto a los responsables del recuento. Eliminen un voto «No No» porque se trata del mío. Y voté porque supe que lo habían hecho personas que nada tienen que ver con Cataluña. Al menos, mi tercer apellido es Gavaldá, y lo hice en honor de mi abuela. Muchos han votado en diferentes colegios, y un cachondo mental lo ha inmortalizado en las redes sociales con imágenes mientras depositaba su papeleta en tres mesas diferentes y con distinto horario. Y también han votado niños. A los niños les gustan mucho las huchas y las urnas, todo lo que tenga una rajita para meter una moneda o un papelito. Como se trataba de una jornada festiva, los padres han llevado a sus niños a votar, y mucho que me alegro porque a los hijos hay que procurarles felicidad y diversión. Había cámaras y reporteros en las salidas de los presumibles colegios electorales. Salió de uno de ellos un apuesto hindú, un «sij» con su bello turbante amarillo, coincidente con el tono de los partidarios de la cosita. El periodista de TV3 le preguntó en catalán si había votado a favor o en contra de la independencia de Cataluña. Y el hindú respondió: «Ashma falhá tu nubuk Kandassar». Una respuesta como poco, emocionante y de gran hondura catalanista.

Un grupo de jubilados «sioux», nada conocedores de España, solicitaron a su guía turístico barcelonés que les organizara una visita al Bernabéu para recorrer el museo y hacerse una foto con Cristiano Ronaldo. El guía les informó que era imposible, pero que los llevaría a votar en unas urnas de cartón las papeletas que les había repartido en el autobús. Lo pasaron muy bien votando, y cuando retornen a Dakota del Sur contarán a sus nietos que estuvieron en una ciudad muy simpática donde votaron «Sí Sí». «En España no se vota como aquí “Sí” o “No”, sino “Sí Sí” o “No No”. Son muy divertidos, pero no pudimos hacernos la foto con Cristiano Ronaldo».

Resultó sorprendente y muy civilizado, el júbilo –apenas hubo protestas–, que rodeó al matrimonio Pujol mientras hacían cola para votar. Decenas de fotos con los otros componentes de la cola, deseosos de inmortalizarse junto a esa simpática pareja que tanto ha hecho por Cataluña.

No se puede ofrecer el resultado definitivo porque el derecho a votar permanecerá vigente durante quince días más. Todo muy normal, muy serio y bastante significativo.

Hoy tocaba baño y masaje.