Picardo y el PSOE

Al final sí ha habido reunión, y por más que Soraya Rodríguez haya intentado pasarle el marrón a la Ejecutiva Federal, que es como señalar con el dedo a ninguna parte porque la cúpula de mando socialista está como está, lo cierto es que se mire por dónde se mire, el PSOE le ha dado munición a Fabian Picardo, que es un señor que ha tenido la desfachatez de venir a España a buscar apoyos contra España. No parece que sea lo más inteligente para simpatizar con los pescadores de Algeciras, que el día que toque irán a depositar su voto en las urnas como todo hijo de vecino. Es posible que los diputados Moscoso y Chaves hayan tomado la iniciativa sin encomendarse a nadie, pasándose por las columnas de Hércules las directrices de su jefa en el grupo parlamentario y a título personal como aquel que va a tomarse unos pescaítos fritos con un colega. En ese caso, además de al Gobierno, a la que han dejado a los pies de los caballos es a la propia Soraya Rodríguez, a la que quizá estos dos compañeros no le auguren una vida larga y fructífera como portavoz una vez que el domingo haya un nuevo secretario general. Otra posibilidad es que estos dos dinosaurios hayan decidido inmolarse una vez muertos como venganza por ese afán regeneracionista que les condena a pasar por el desguace. Vaya usted a saber. Lo cierto es que el inefable Picardo ha conseguido marcharse del territorio enemigo sin llevarse el carné de baile vacío, y, por mucho que ahora se intente marcar distancias entre el grupo parlamentario y la Ejecutiva Federal, lo que va a vender en cuanto pise el Peñón es que el principal partido de la oposición ha tenido a bien bailarle las aguas jurisdiccionales. Y mientras tanto, los candidatos sin decir ni pío.