Todas son de oro

Por sus medallas las conoceréis. Las mujeres deportistas españolas son noticia cuando consiguen algo con lo que no han podido sus colegas masculinos. Ha ocurrido en los campeonatos mundiales de natación, donde el oro, las platas y bronces han sido propiedad de las mujeres. En los Juegos Olímpicos del pasado año en Londres se salvaron los muebles gracias a las chicas. En Barcelona, la selección de waterpolo ha conquistado el más preciado metal y no cabe adjudicar el triunfo a la circunstancia favorable de competir en casa, ni otras banalidades. En Londres, hace un año ganaron la plata, lo que quiere decir que estaban en el camino. No ha sido casualidad. Ahora ya conocemos los nombres de Jennifer Pareja, Pilar Peña y apellidos Bach, Tarragó, López, Lanz o nombres como Maica y Miranda, actuaciones tan estelares como la guardameta Laura Ester, la mejor del mundial en su puesto y que compartió honores individuales con Jennifer, nominada la mejor jugadora.

No ha sido tanta noticia la actuación de las chicas de la sincronizada, porque para ello ya estábamos preparados. Ona Carbonell ha sido la gran heroína y todas han mantenido su lucha con chinas y rusas. En la conquista de las medallas en pruebas natatorias, han brillado Mireia Belmonte y Melanie Costa. La primera, como en Londres, no se ha conformado con una subida al podio. Y no han estado solas porque cerca del éxito, finalistas, han estado Martina García, Merche Peris, Judit Ignacio y Bea Gómez. Entre estos nombres puede existir ilusión olímpica porque la edad les permitirá acudir a Brasil.