Lo siento por la fachosfera, pero el BNG algo ha ganado

Puede, sólo puede, que esta noche el Partido Popular mantenga la mayoría absoluta en Galicia y tal vez quede alguna esperanza de reconducir alguna de las fechorías nacionalistas. Con padecer la duda, creer que los gallegos pueden crear otro Frankenstein comandado por Ana Pontón, la Mary Shelley de Lugo, temer que otro monstruo nazca entre la frondosidad y la bruma, con esto ya tiene bastante el BNG para darse por ganador, aunque pierda. Dicen que Pontón muestra su cara «amable» y que por eso muchos electores le regalarán su papeleta. También suponemos que Alfonso Rueda se cambiará de muda cada día y que ofrecerá su mejor sonrisa. Pero el errático PP de esta campaña sigue siendo el «amable» y tontorrón PP, y el BNG, las siglas que enmascaran a un nacionalismo tan etnicista y destructor como el resto de los nacionalismos.

Según se ve desde este lado de la fachosfera, la presidencia abriría la puerta a un terrible movimiento que espera algún día postrarse ante su propio «procés». Ya lo hizo la «amable» Pontón cuando el intento de golpe de Estado en Cataluña que ahora el Gobierno quiere amnistiar. Celebró lo que habían hecho sus colegas catalanes y expresó el deseo de que Galicia se convierta algún día en una república independiente. ¿O ha cambiado de opinión como Pedro Sánchez?

Si Pontón vence, los gallegos nos habrán disparado un tiro en el pie, porque en esta ocasión las urnas no sólo les atañe a ellos sino al resto de los españoles que veríamos ratificada la política radical y fratricida que nos acuna mientras el dragón nos escupe con lenguas de fuego, no tan lejos de Pentecostés.

«El BNG ve ‘lawfare’ de la peor especie la ‘grotesca’ instrucción sobre la trama rusa del ‘procés’». Esto fue lo que dijo el diputado del BNG Néstor Rego en el Congreso de Madrid. No sabemos con qué argumentos tira de las orejas al juez, pero deja claro que el lenguaje y el relato van en la dirección correcta, por donde sopla el viento gubernamental. Tampoco se opusieron a Putin cuando invadió Ucrania, como sus colegas de Podemos, y ahora de Sumar, así perezcan los opositores al gran zar en cárceles ignotas. Si el BNG tuviera que pasar un test de la nueva progresía fascista alcanzaría la máxima puntuación. Chávez, Castro, todo el catálogo bermellón sería convenientemente marcado con una x y sus consabidas contradicciones que hace tiempo aprendieron a cabalgar. ¡Santiago, patrón de España! Les sería muy fácil gobernar en la coalición del pánico.