“Nuestra pericia de 15 años realizando este tipo de intervenciones garantiza un resultado excelente”

Cada día son más los hombres que se deciden por un trasplante capilar, y cada día son más las clínicas en España que llevan a cabo este tipo de intervenciones. Ya no es necesario viajar a Turquía, nuestro país reúne grandes especialistas que desde hace años practican la técnica del microinjerto capilar. Hoy hablamos con Leticia Merino Rosario, Directora de Leticap, clínica situada en Málaga capital.

¿Qué profesionales médicos hay detrás de Leticap? ¿Cuánta experiencia acumulan en los tratamientos capilares?

En Leticap, contamos con un equipo de profesionales que lleva más de 15 años realizando la técnica de microinjerto capilar. En el pasado, desarrollamos la labor en distintos centros del ámbito nacional e internacional y, posteriormente, decidimos crear nuestra propia clínica equipada con tecnología punta, con el objetivo de desarrollar una experiencia única para el paciente con un alto grado de satisfacción, no sólo de la cirugía, sino de la atención previa y post cirugía.

Hay que recordar que el microinjerto capilar ha de ser realizado por un médico y en un quirófano…

Tanto el personal cualificado como las instalaciones adecuadas para realizar las cirugías deben pasar los exhaustivos controles sanitarios por la que nos regimos en la UE. Es importante destacar que la cirugía, si bien es de carácter ambulatorio, es limitada en cuanto al número de intervenciones que son recomendadas realizar (una media de 2 cirugías en la vida de una persona), y el resultado de las intervenciones es visualmente notorio en el día a día. En este sentido, los pacientes deben ser conscientes de elegir y exigir garantías, y en nuestro país las tenemos.

Para entender que se trata al fin y al cabo de una cirugía, ¿en qué consiste exactamente la técnica?

Trabajamos realizando la técnica FUE, consistente en extraer unidades foliculares una a una para implantarlas en las zonas que queramos repoblar. El criterio de extracción y posterior colocación de las unidades debe ser minucioso, para no castigar la zona donante –y que quede imperceptible- y un resultado natural y homogéneo en las zonas donde queremos repoblar. El diseño inicial de la cirugía, la escucha atenta del paciente de las expectativas que quiere alcanzar, y la pericia de 15 años realizando este tipo de intervenciones, garantizan un resultado excelente.

¿Todo depende de la calidad del pelo de la zona donante? ¿Podemos hablar de que existe el riesgo de que no se logre el éxito?

La calidad del pelo es un punto a favor, que puede ser mejorada complementariamente con fármacos, pero es la densidad de la zona la que nos permite “densificar” las zonas que queremos trabajar. Además, no existe el riesgo de rechazo desde el punto de vista clínico, puesto que estamos hablando de un trasplante autólogo, es decir, un autrotrasplante en el que la persona es donante y receptor a la vez. La seguridad en este caso se sitúa en el 100%.