20 Aniversario

Una nueva Roche para una nueva realidad

La compañía celebra estos meses su 125 aniversario y conmemora la innovación, no solo en nuevas terapias, sino también en gestión y la forma de relacionarse con la sociedad

La farmacéutica ha culminado en el último año un profundo proceso de transformación
La farmacéutica ha culminado en el último año un profundo proceso de transformaciónRocheRoche

Roche Farma ha culminado, en el último año, un profundo proceso de transformación que ha llevado a la compañía a adoptar un nuevo modelo de relación con los profesionales sanitarios, los gestores, las administraciones, los pacientes y la sociedad en su conjunto. Un nuevo modelo que, sobre la base de la ciencia y la innovación, ha puesto el acento en la colaboración público-privada y en las alianzas con los distintos agentes que conforman el sistema sanitario.

¿El objetivo? Ser capaces, entre todos, de co-crear soluciones a los problemas y a las demandas que emanan del propio sistema, convirtiendo este trabajo conjunto en avances tangibles para la salud y la calidad de vida de los pacientes.

Roche está celebrando estos meses su 125 aniversario, en el que conmemora en realidad 125 años de innovación, una innovación que no solo ha de entenderse como un concepto asociado a la I+D de nuevas terapias y herramientas diagnósticas, sino también a la gestión y a la forma relacionarse con el sistema sanitario y la sociedad. Y es aquí donde la compañía ha sido pionera generando un nuevo modelo basado en la ciencia con un objetivo muy ambicioso para esta década: lograr ofrecer el doble de avances médicos a la mitad de coste para la sociedad.

Se trata de un nuevo modelo que ha modificado profundamente la forma en la que la compañía se relaciona con el entorno, pero también la forma en la que se organiza internamente. En el primer caso, la compañía se ha convertido en un auténtico aliado del sistema sanitario que está siempre atento a las necesidades de los distintos partners.

Aunque el proceso sigue en marcha, Roche ya ha logrado plasmar en la realidad en 2022 muchos de los conceptos que el año pasado figuraban más en el plano teórico, como el desarrollo de proyectos y líneas de trabajo en clave de co-creación, una forma de trabajo que permite localizar el talento que está fuera de la compañía y llegar a acuerdos para generar sinergias que se traduzcan en soluciones innovadoras.

Un buen ejemplo de este nuevo modelo se ha dado en el campo de la oftalmología, donde Roche ha lanzado este año la primera aceleradora de startups de esta área terapéutica: Púlsar by Roche. La aceleradora es un proyecto de co-creación entre el Hospital Clínico San Carlos, de Madrid, Wayra (grupo Telefónica) y Roche Farma, todos con la ilusión común de ser capaces de hacer llegar nuevas soluciones a los pacientes con patologías oculares graves, con especial atención a los de retina; y hacerlo a través de una nueva forma de trabajar basada en el partnering.

Púlsar by Roche demuestra que para avanzar no se puede trabajar solo: hoy en día es clave contar con las mejores ideas, con el talento, independientemente de dónde se genere. Otros ejemplos de trabajo conjunto son las distintas aulas y cátedras que Roche mantiene con distintas universidades, así como las alianzas con las consejerías de Sanidad o las becas de investigación.

Pero este nuevo modelo también ha supuesto profundos cambios de puertas para adentro, siendo uno de los más destacados la reformulación de roles profesionales. Buena prueba de ello es la creación de la posición del «Patient Journey Partner» (PJP), que tiene un enfoque que va mucho más allá del producto (beyond the pill) y cuenta entre sus objetivos con co-crear junto con los distintos partners proyectos que aporten valor y que se materialicen en mejoras reales para los pacientes.

El futuro

El PJP es protagonista de la transición desde un modelo tradicional, basado en ofrecer medicamentos dirigidos a millones de pacientes y con más peso comercial, a un nuevo enfoque con base en ciencia que busca generar colaboraciones, innovar y liderar el impulso a las nuevas ideas que permitan diseñar soluciones personalizadas para cada paciente.

Además, y este es un cambio fundamental, el PJP no tiene incentivos por rentabilidad ni por ventas.

Estos son algunos de los mimbres con los que Roche afronta un futuro que, como todo lo que está por venir, está plagado de incógnitas, pero que ya nos ha mostrado varias certidumbres que dibujan los límites del camino: la importancia de seguir apostando por la I+D biomédica y la innovación; el avance imparable de la digitalización y las ciencias de datos; un concepto holístico del cuidado de la salud basado en una Medicina Personalizada que aúna diagnóstico de precisión y terapias avanzadas; y un nuevo modelo de relación con el sistema sanitario siempre en beneficio del paciente.