Investigación

¿Qué comer para reducir en un 88% los sofocos asociados a la menopausia?

Una intervención dietética es prácticamente igual de efectiva que la terapia de reemplazo hormonal para reducir los sofocos menopáusicos. Pero, ¿qué alimentos ha de incluir?

Un cambio en la dieta puede reducir los sudores nocturnos y los sofocos
Un cambio en la dieta puede reducir los sudores nocturnos y los sofocoslarazon

Un equipo de investigadores ha descubierto que una intervención dietética es casi tan efectiva (88%) como la terapia de reemplazo hormonal (70%-90%) para reducir los sofocos menopáusicos, y todo ello sin riesgos para la salud asociados. Así se desprende de un estudio publicado por la Sociedad Norteamericana de Menopausia en la revista “Menopause”.

El ensayo WAVS, llamado el Estudio de Mujeres para el Alivio de los Síntomas Vasomotores, encontró que una dieta basada en plantas rica en soja redujo los sofocos de moderados a severos en un 88% y ayudó a las mujeres a perder, en promedio, ocho libras en 12 semanas (unos 3,6 kg).

“Aún no entendemos por completo por qué funciona esta combinación, pero parece que estos tres elementos son clave: evitar los productos de origen animal, reducir la grasa y agregar una porción de soja”, afirma el investigador principal del estudio Neal Barnard, presidente del Comité de Médicos y profesor adjunto de la Facultad de Medicina de la Universidad George Washington.

“Nuestros resultados reflejan las dietas de lugares del mundo, como el Japón preoccidentalizado y la península de Yucatán de hoy en día, donde prevalece una dieta baja en grasas y basada en plantas, incluida la soja, y donde las mujeres posmenopáusicas experimentan menos síntomas”.

El estudio es la segunda fase de un ensayo de dos partes, el primero de los cuales también se publicó en la revista “Menopause” en 2021.

El primer ensayo planteó la cuestión de si esta mejora sintomática podría atribuirse a temperaturas más frías. Pero las mujeres que comenzaron el estudio cuando la temperatura subió en primavera tuvieron el mismo beneficio, descartando el efecto de la temperatura exterior.

“Estos nuevos resultados sugieren que un cambio en la dieta debe considerarse como un tratamiento de primera línea para los síntomas vasomotores molestos, incluidos los sudores nocturnos y los sofocos”, explica el Dr. Barnard.

En el estudio se incluyeron 84 mujeres posmenopáusicas que reportaron tener dos o más sofocos al día. Fueron asignadas al azar a un grupo de intervención, que consistía en una dieta vegana baja en grasas, que incluía media taza de soja cocida al día, o a un grupo de control que no hizo cambios en la dieta durante 12 semanas.

“Este estudio demuestra la eficacia de una intervención dietética para los síntomas de la menopausia”, incide el doctor Barnard.

“Además, es precisamente la misma dieta que se esperaría que disminuya los problemas de salud de muchas mujeres que llegan a la menopausia: un riesgo creciente de enfermedad cardíaca, cáncer de mama y problemas de memoria”, concluye.