Una de cada diez personas tiene deficiencia en esta vitamina

Las deficiencias nutricionales ocurren cuando el cuerpo no recibe la cantidad adecuada de nutrientes esenciales para funcionar correctamente. Estos nutrientes incluyen vitaminas, minerales, proteínas, carbohidratos y grasas. Cuando hay una falta o desequilibrio de estos nutrientes, pueden surgir deficiencias que afectan la salud de manera negativa.

Aproximadamente, una de cada diez personas puede experimentar síntomas relacionados con la deficiencia de vitamina B12 sin reconocer el problema. Los individuos mayores y aquellos que siguen una alimentación vegetariana o vegana tienen un mayor riesgo de padecer esta deficiencia. Además, es crucial que las mujeres embarazadas garanticen un adecuado consumo de esta vitamina tanto para su propia salud como para la salud de su bebé.

Síntomas de la deficiencia de la Vitamina B12

Las causas principales de la deficiencia de vitamina B12 incluyen una ingesta dietética insuficiente de esta vitamina, dificultades en la absorción en el sistema gastrointestinal, y el uso recreativo del óxido nitroso, popularmente conocido como gas de la risa.

Factores como la edad, enfermedades autoinmunes, la toma de ciertos medicamentos como la metformina, y antecedentes de cirugías gastrointestinales también incrementan el riesgo de deficiencia.

La falta de vitamina B12 en la población general puede desencadenar diversos síntomas y complicaciones, que van desde problemas de salud mental hasta trastornos neurológicos.

El desafío radica en que una deficiencia leve puede permanecer sin ser detectada durante períodos prolongados antes de presentar síntomas evidentes. Por lo tanto, es recomendable garantizar una adecuada ingesta a través de la alimentación o considerar la suplementación. Si se sospecha de una deficiencia, se puede realizar un análisis de sangre específico para confirmarla.

Estos son algunos signos habituales de deficiencia:

Los signos comunes de deficiencia de vitamina B12 incluyen fatiga, debilidad, palidez, falta de aliento, mareos, entumecimiento o hormigueo en manos y pies, dificultad para caminar, problemas de memoria y concentración, así como cambios en el estado de ánimo como irritabilidad o depresión. Además, también pueden presentarse síntomas digestivos como pérdida de apetito, diarrea o estreñimiento. Si experimentas alguno de estos síntomas, es importante consultar a un profesional de la salud para obtener un diagnóstico adecuado y recibir el tratamiento necesario.

Cómo solucionar la deficiencia

Los tratamientos recomendados abarcan inyecciones intramusculares de vitamina B12 o terapia de reemplazo oral, dependiendo de la causa subyacente.

Las inyecciones pueden ser preferibles para aquellos pacientes que requieren una respuesta rápida debido al riesgo de deterioro acelerado que podría impactar su calidad de vida de manera significativa.

Según las pautas médicas, las inyecciones podrían ser preferibles sobre los suplementos orales en casos donde existan preocupaciones sobre la adherencia al tratamiento por vía oral.

Cuando la deficiencia se atribuye a la dieta, los médicos generales deberían ofrecer recomendaciones sobre modificaciones en la alimentación y la posibilidad de suplementos disponibles sin receta médica.