Nutrición

¿Qué es la alimentación funcional y cómo podemos aprovecharnos de todos sus beneficios?

Los beneficios de la alimentación funcional son para todos, pero son especialmente recomendables para aquellos con necesidades nutricionales especiales

Esta dieta 'marca España' ayuda a adelgazar y rejuvenece el cerebro según la ciencia
Dieta verduras comidaFreepik

La alimentación funcional, un enfoque dietético innovador y prometedor, se ha convertido en los últimos años en el centro de atención en el mundo de la nutrición. Esta metodología va más allá de satisfacer nuestras necesidades nutricionales básicas, promoviendo beneficios adicionales para la salud y el bienestar. La alimentación funcional se basa en la interacción a nivel molecular de los alimentos con nuestro organismo, influyendo directamente en nuestros sistemas y funciones.

Los alimentos funcionales no son solo aquellos enriquecidos con nutrientes específicos como Omega3, vitamina A y D, o zinc, que se encuentran en leches, yogures, zumos, cereales y huevos. Este enfoque dietético también incluye alimentos tradicionales como frutas, verduras, productos lácteos, cereales integrales, aceite de oliva y soja, valorados por su capacidad para prevenir y reducir factores de riesgo que pueden desencadenar enfermedades.

Aunque no son estrictamente necesarios para la salud, los beneficios de la alimentación funcional son para todos, siendo especialmente recomendables para aquellos con necesidades nutricionales especiales, como mujeres embarazadas, niños, mayores, personas con deficiencias nutricionales, intolerancias alimentarias y riesgo de enfermedades crónicas.

Alimentación en la menopausia
Alimentación en la menopausiaDREAMSTIMEDREAMSTIME

La personalización es un elemento clave en la alimentación funcional. Cada individuo tiene necesidades y condiciones específicas, por lo que esta dieta debe ser supervisada por un profesional de la nutrición, quien nos guiará en la elección de los alimentos más adecuados para nuestras necesidades cambiantes. La enseñanza de hábitos saludables que nos permitan mantener este tipo de alimentación a largo plazo también es fundamental.

Existen varios tipos de alimentos funcionales, entre ellos podemos incluir a los probióticos, prebióticos, simbióticos, vitaminas y minerales, antioxidantes, ácidos grasos, aminoácidos y fitoquímicos. Estos están orientados a ejercer un efecto en diferentes funciones del organismo, desde la prevención y tratamiento de enfermedades como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares, hasta la defensa contra el estrés oxidativo y la promoción de un peso saludable.

Además, puede ser un complemento en el tratamiento de la ansiedad y depresión, mejorar el control hormonal y ayudar a equilibrar el organismo. Uno de los aspectos más fascinantes de la alimentación funcional es su enfoque en la salud de la microbiota intestinal, que puede mejorar la digestión y la absorción de nutrientes.