Salud cardiovascular

Logran latidos más eficaces en pacientes con marcapasos

La mejora se debe a la estimulación, una técnica en proceso de ser instaurada

Paciente con marcapasos
Paciente con marcapasosQUIRÓNSALUDQUIRÓNSALUD

La razón más común por la que los médicos recomiendan implantar un marcapasos es porque el corazón late demasiado lento (bradicardia), se detiene (lo que provoca desmayos) y, en ocasiones, para prevenir o tratar un latido cardíaco irregular o demasiado rápido (taquicardia).

El marcapasos convencional incluye el implante de dos electrodos dentro del corazón: uno para la estimulación en la aurícula derecha y otro que consigue lo mismo en el ventrículo derecho de forma coordinada.

En ocasiones, la presencia de cardiopatía con debilidad del corazón e insuficiencia cardíaca obligaba a sistemas de estimulación cardíaca con tres electrodos, situándose el tercero en el ventrículo izquierdo, lo que a veces resulta de difícil implantación.

Ahora, el Hospital Quirónsalud Marbella aplica una novedosa técnica que, mediante la estimulación fisiológica, mejora el implante de marcapasos, un procedimiento que está en proceso de instauración en España.

«Consiste en colocar el electrodo ventricular en la rama izquierda del sistema de conducción del corazón. Con ello conseguimos una activación eléctrica cardíaca más fisiológica, haciendo que la contracción cardíaca sea más eficaz», detalla el doctor Javier Alzueta, jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Quirónsalud Marbella.

Esta técnica les permite conseguir una contracción adecuada del músculo cardíaco, sin necesidad de un tercer electrodo en muchos pacientes, explica la cardióloga del citado hospital Julia Fernández Pastor.

La estimulación fisiológica del corazón es importante porque, como apunta el doctor Alzueta, proporciona el sistema de conducción con el que todos nacemos: «Cuando existe una patología que afecta al sistema de conducción cardíaca, imitar lo máximo posible nuestro propio sistema de conducción es lo que más se acerca a la estimulación fisiológica».

«En el caso de la estimulación de la rama izquierda –prosigue– lo que logramos es estimular el corazón desde dentro o muy cerca del sistema de conducción, con lo que se obtiene una estimulación más parecida a la del corazón con un sistema de conducción sano».

En cuanto al perfil de los candidatos, «todos los pacientes» pueden realizarse esta técnica de implante de electrodo de ventrículo derecho en la rama izquierda.

Algo crucial, ya que «desde hace años el electrodo ventricular se colocaba en el ápice del ventrículo derecho, lejos del sistema de conducción, lo que puede producir en algunos casos falta de sincronía en la contracción ventricular y, ocasionalmente, pérdida de fuerza del corazón», precisa el doctor.

De este modo, con esta técnica, al estimular ambos ventrículos de forma simultánea, «la contracción se vuelve sincrónica y el paciente mejora de sus síntomas de insuficiencia cardíaca y la función ventricular mejora y puede llegar incluso a normalizarse en algunos casos», destaca el doctor Alzueta.

En comparación con la implantación del tercer electrodo en el ventrículo izquierdo, el doctor explica que «la estimulación cardíaca puede ser parecida», con la ventaja de que es «más sencilla técnicamente y, lo dicho, se podría utilizar en todos los pacientes».

Ahora bien, «no existen estudios que comparen ambas técnicas y por el momento la resincronización cardíaca con un tercer electrodo sí ha demostrado beneficios clínicos indudables como una mejoría en la calidad de vida y en la supervivencia del paciente», reconoce el doctor.

Se trata en definitiva de una alternativa eficaz para pacientes especialmente jóvenes con cardiopatía leve que van a convivir con el dispositivo muchos años.

«En todos los casos los resultados obtenidos han sido acordes a los estudios publicados logrando un correcto control de los síntomas y la estancia hospitalaria ha sido igual que con el implante convencional, consiguiendo el alta médica al día siguiente», especifica la doctora Fernández Pastor.

¿Qué autonomía es líder en marcapasos?

Un total de 38.893 marcapasos se implantaron en España durante el año 2021, según el Registro Español de Marcapasos, publicado en su día por la Revista Española de Cardiología. Es decir, 822 unidades por millón (U/M), una cifra algo menor que la comunicada por Eucomed de 849. Por comunidades autónomas, Galicia, Principado de Asturias y Castilla y León destacan, con tasas de 1.172, 1.052 y 1.003 U/M de marcapasos, mientras que Navarra y las Islas Canarias son las comunidades que menos implantaron, con 703 y 704 unidades por millón, respectivamente.