Sociedad

El breve sueño de Greta

La Agencia Internacional de la Energía (AIE) estima en un 6 por ciento la caída de la demanda mundial para este año de 2020.O lo que es lo mismo: dos gigatoneladas y media menos de emisiones de Co2 en la atmósfera.

Caída energía
caída de la demanda global de energíaJosé Maluenda

El sueño de la niña Greta será, sin embargo, breve. Al menos así lo afirman los técnicos de la Agencia Internacional de la Energía que advierten de que la caída de las emisiones de Co2 a causa del parón económico de la pandemia vendrá seguida por un incremento mayor en el año 2021, cuando la industria mundial recurra a las fuentes energéticas más baratas y abundantes para apuntalar la recuperación. Pero, mientras eso ocurre, las renovables están de enhorabuena: privilegiadas por las distintas normativas verdes a la hora de entrar en los «mix» de distribución a la red, la energía procedente de estas fuentes es la única que crecerá este año, hasta un 6 por ciento más. El petróleo, por el contrario, será el más perjudicado, con una caída del 9,3 por ciento; seguido del carbón, con un descenso del consumo del 8 por ciento, a causa del frenazo de la industria mundial, en especial de la de China. Entre los datos que maneja la AIE, por sus siglas en español, claro, y que dan cuenta de la recesión que nos amenaza, está la reducción de la producción mundial de electricidad de más del 5 por ciento, una caída inédita desde la Gran Depresión de los años 30 del pasado siglo. Por regiones, Estados Unidos, la Unión Europea y Asia sufrirán las mayores contracciones del consumo energético. Por contra, la reducción de los gases de efecto invernadero, en especial de Co2, será notable: hasta 2,6 gigatoneladas menos. Como elemento de comparación, en la crisis financiera de 2008, las emisiones de Co2 sólo cayeron en 0,4 gigatoneladas. Dando por cierto que no hay más verdad que la que dice que el Co2 es malo y sostener otra opinión –que el Co2 es el gas de la vida– es cosa de malvados herejes, estamos ante una buena noticia, aunque ya hemos advertido de que será flor de un día. Si todo sale razonablemente bien, tras la catástrofe de la pandemia la recuperación de la economía será rápida e intensa en casi todo el mundo, ya que lo de España, que depende mucho del Turismo, está por ver, y se volverá a los altos consumos energéticos de la pasada década.