Alcoholímetro antiarranque: qué vehículos estarán obligados a llevarlo desde julio

Las novedades más llamativas de la nueva ley de Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, que entró en vigor el pasado 21 de marzo, pasan por la retracción de seis puntos por conducir con el teléfono móvil en la mano o la supresión del margen de 20 kilómetros/hora para adelantar. Además, el uso incorrecto del cinturón de seguridad o sistemas de retención infantil supondrán la pérdida de 4 puntos, por los tres de hasta ahora. Las distracciones o el mal uso de los dispositivos de seguridad provocan una de cada cuatro muertes en carretera.

Pero la mayor causa de siniestros mortales sigue siendo el consumo de alcohol y sustancias prohibidas. De hecho, la memoria anual sobre muertes en accidentes de tráfico de la DGT indica que sólo en 2020 el 48,7% de los conductores fallecidos en España dio positivo en alcohol o drogas. Por ello, la nueva Ley de Tráfico ha decidido tomar cartas en el asunto y aporta novedades en este sentido. Una de ellas es la obligatoriedad de la equipar los vehículos con alcoholímetros antiarranque. De momento, a medida sólo afecta a los vehículos destinados al transporte de personas y mercancías peligrosas y tienen como tope para su instalación el el 6 julio.

Aunque en un principio la medida no afecta a los vehículos particulares, no se descarta que a medio plazo sí sea obligatorio. De momento, la norma da un primer paso en este sentido y establece que todos los vehículos fabricados a partir del 5 de julio de este año lleven integrado un sistema de conexión para su instalación (una preinstalación).

De esta manera se facilita su instalación de forma sencilla y sin coste con vistas a su posible obligatoriedad. “La introducción de un dispositivo autoarranque Interlock en este tipo de vehículos ayudará reducir notablemente la posibilidad de accidentes en carretera a consecuencia del alcohol, en línea con los objetivos de Naciones Unidas y la Unión Europea”, explica Dionisio Martínez de Velasco, managing director de Dräger Iberia, compañía que comercializa estos dispositivos antiarranque.

¿Qué son los Interlock y cómo funcionan?

También conocido como dispositivo de bloqueo de arranque, se trata de un sistema avanzado de asistencia a la conducción (ADAS) que obliga al conductor a expirar aire en un etilómetro para medir los niveles de alcohol en el aliento. Si los datos obtenidos no están dentro de los márgenes legales o o no se utiliza correctamente el dispositivo, el sistema impide el arranque del vehículo hasta pasado un determinado tiempo.

En cuanto a los menores de edad y el consumo de alcohol, la nueva normativa establece que la tasa de alcohol en sangre o en aire espirado deberá ser cero sea cual sea el tipo de permiso del que dispongan (ciclomotores, microcoches -permiso AM-, motos hasta 125 cc (A1), bicicletas y vehículos de movilidad personal, donde se incluyen los patinetes). De igual manera, no podrán circular con presencia de drogas en el organismo.

Además de el alcoholímetro, el teléfono móvil o los dispositivos de seguridad, la ley trata de dar mayor protección a los ciclistas y ciclomotores y obliga a cambiar de carril para adelantarlos cuando se circule por vías con más de un carril por sentido. En vías de un solo carril, habrá que mantener la separación mínima lateral de 1,5 metros porque en caso contrario será sancionado con la pérdida de 6 puntos (antes eran 4). La multa seguirá siendo de 200 euros. También se prohíbe parar o estacionar en un carril bici o en vías ciclistas. Su incumplimiento se considera una infracción grave. También supondrá la pérdida de 6 puntos cuando se arroje cualquier objeto a la vía que pueda provocar un accidente o un incendio y la multa será de 500 euros.

Asimismo se unifica el período que debe pasar sin cometer infracciones para recuperar el saldo inicial de puntos y se establece en dos años. Hasta ahora ese plazo variaba en función de la gravedad de la infracción.