Salud

Adiós al mito de los 8 vasos de agua diarios: son demasiados para la mayoría de personas, según los científicos

Un estudio publicado en la prestigiosa revista Science desmonta la recomendación

Consejos para beber más agua
Consejos para beber más aguaObjetivoBienestarLa Razon

Beber agua es necesario para que el organismo funcione adecuadamente. Regula y mantiene la temperatura corporal, permite el trasporte de nutrientes a las células, mejora la función digestiva, protege las articulaciones, ayuda a la eliminación de toxinas... Los beneficios del agua para la salud y el bienestar general son innumerables. Seguro que has escuchado miles de veces que debes tomar mínimo ocho vasos de agua al día (cada vaso es aproximadamente un cuarto de litro), Una recomendación que acaba de desmontar el estudio más riguroso realizado hasta la fecha sobre la cuestión. Publicado en la prestigiosa revista Science, el trabajo revela que la mayoría de las personas solo necesitan entre 1.5 y 1.8 litros al día, una cantidad inferior a los dos litros que se suelen recomendar.

“La recomendación actual de ocho vasos al día no está respaldada científicamente en absoluto”, afirma Yosuke Yamada, del Instituto Nacional de Innovación Biomédica, Salud y Nutrición de Japón, y uno de los primeros autores del estudio. “La mayoría de los científicos no está seguro de dónde procede esta recomendación”. El investigador explica que las estimaciones anteriores de las necesidades de agua han tendido a ignorar el contenido de agua de los alimentos, que pueden aportar una proporción sustancial de nuestra ingesta total. “Si sólo comemos pan, tocino y huevos, no obtendremos mucha agua de los alimentos, pero si comemos carne, verduras, pescado, pasta y arroz, podemos obtener aproximadamente el 50% de nuestras necesidades de agua de los alimentos”, afirma Yamada.

Los investigadores evaluaron la ingesta de agua de más de 5.600 personas de 26 países, con edades comprendidas entre los 8 días y los 96 años, Los sujetos del estudio debían beber una cantidad medida de agua en el que algunos de los átomos de hidrógeno se sustituyeron por deuterio, un isótopo estable del hidrógeno que se encuentra de forma natural en el cuerpo humano. La tasa de eliminación del deuterio se utilizó para conocer la rapidez con la que se renueva el agua en el cuerpo y descubrieron que la medida variaba mucho en función de la edad, el sexo, los niveles de actividad y el entorno de la persona.

Para el estudio se recogieron y analizaron los datos, comparando factores ambientales -como la temperatura, la humedad y la altitud de las ciudades de origen- con las mediciones de la renovación del agua, el gasto energético, la masa corporal, el sexo, la edad y la condición de deportista. También incorporaron el Índice de Desarrollo Humano de las Naciones Unidas, una medida compuesta de un país que combina la esperanza de vida, la escolarización y los factores económicos.

El volumen de renovación del agua alcanzó su punto máximo en los hombres del estudio durante los 20 años, mientras que las mujeres mantuvieron una meseta desde los 20 hasta los 55 años. Los recién nacidos, sin embargo, son los que más agua renuevan diariamente, sustituyendo alrededor del 28% del agua de su cuerpo. El nivel de actividad física y el estado deportivo explican la mayor parte de las diferencias en la renovación del agua, seguidos del sexo, el Índice de Desarrollo Humano y la edad.

En igualdad de condiciones, los hombres y las mujeres difieren en aproximadamente medio litro de renovación de agua. Como base de referencia, los resultados del estudio prevén que un hombre no deportista (pero con una actividad física media) de 20 años, que pesa 70 kilos y que vive a nivel del mar en un país desarrollado con una temperatura media del aire de 10 grados C y una humedad relativa del 50%, ingiere y pierde unos 3,2 litros de agua al día. Una mujer de la misma edad y nivel de actividad, con un peso de 60 kilos y que viva en el mismo lugar, gastaría 2,7 litros. Los investigadores descubrieron que si se duplica la energía que utiliza una persona, su consumo diario de agua aumentará en aproximadamente un litro. Cincuenta kilos más de peso corporal añaden 0,7 litros al día. Un aumento del 50% en la humedad aumenta el consumo de agua en 0,3 litros. Los deportistas utilizan aproximadamente un litro más que los no deportistas.

Los investigadores también descubrieron que cuanto más bajo es el Índice de Desarrollo Humano de tu país, más agua gastas al día. “Eso representa la combinación de varios factores -subraya Dale Schoeller, profesor emérito de ciencias de la nutrición de la Universidad de Wisconsin-Madison (Estados Unidos), que lleva décadas estudiando el agua y el metabolismo-. Las personas de los países con un IDH bajo tienen más probabilidades de vivir en zonas con temperaturas medias más altas, más probabilidades de realizar trabajos físicos y menos probabilidades de estar dentro de un edificio con climatización durante el día. Eso, sumado a que es menos probable que tengan acceso a un sorbo de agua limpia siempre que lo necesiten, hace que su rotación de agua sea mayor”.

Este estudio demuestra que la sugerencia común de que todos deberíamos beber ocho vasos de agua es probablemente demasiado alta para la mayoría de las personas en la mayoría de las situaciones. Según Schoeller, las mediciones mejorarán nuestra capacidad para predecir de forma más específica y precisa las necesidades futuras de agua, sobre todo en circunstancias extremas, y cuanto mejor nos preparemos para las necesidades a largo plazo e incluso para advertir los problemas de salud a corto plazo, creen los investigadores. “Determinar cuánta agua consumen los seres humanos es cada vez más importante debido al crecimiento de la población y al creciente cambio climático -añade Yamada- Dado que la renovación del agua está relacionada con otros indicadores importantes de la salud, como la actividad física y el porcentaje de grasa corporal, tiene potencial como biomarcador de la salud metabólica”.