Málaga
Compartir coche para salvar los amores a distancia
Las relaciones a distancia son algo cada vez más frecuente en España, aunque suelen ser costosas, sobre todo si sumamos los gastos del viaje.
Las relaciones a distancia son algo cada vez más frecuente en España, aunque suelen ser costosas, sobre todo si sumamos los gastos del viaje, por lo que muchos enamorados buscan compartirlos a través de redes como Blablacar, principal web de coches compartidos.
Es el caso de Alejandro, un madrileño que encontró trabajo de informático en Málaga y dejó su amor en su tierra natal. No quiso renunciar a la oportunidad laboral y por ello usa Blablacar, una red social para compartir el gasto de gasolina que, según este joven, le permite ver a su novia más veces.
"No es que tenga un gran sueldo, por lo que compartir coche me permite ir a ver a mi novia más veces a Madrid sin tener que gastarme una fortuna en el AVE", ha dicho este conductor, que reconoce que antes de usar Blablacar se gastaba casi lo mismo en gasolina que en transportes como el autobús.
Hay muchas más personas a las que el amor les obliga a usar esta red social que cuenta con más de siete millones de usuarios y en la que la edad no importa, como en el caso de José, de 55 años, comercial de una empresa madrileña en Málaga, donde reside.
Este comercial suele ir los fines de semana a Madrid, "a ver a mi señora y mis hijos", comenta, y lo que más valora es la compañía, ya que el viaje lo suele hacer "casi obligado", y le permite conocer a gente muy distinta y de distintas edades que ahora le ayudan a compartir gasto.
El viaje Málaga-Madrid cuesta una media de 25 euros en un coche en el que suelen viajar tres personas, junto a su equipaje.
Y puede ser casualidad, pero el Blablacar de Noelia que sale a Madrid desde Málaga lleva a tres enamorados, que trabajan en la ciudad andaluza o en la capital española pero su destino es reencontrarse con su pareja a distancia.
Como Marcos, un policía nacional de Málaga que usa esta red para ver a su novia en su ciudad natal, ya que la profesión lo destinó a Madrid, donde ejerce durante tres días a la semana, mientras que el resto se pasa el día buscando formas de viajar económicamente para ver a su correspondida.
La red todavía cuenta con una mayoría de hombres, un 58 por ciento, frente a mujeres, y el cuarenta por ciento de los usuarios tienen entre 18 y 25 años.
Pero los datos de Blablacar no sitúan al amor como uno de los principales motivos del uso de la red para viajar, sino el ahorro, y es que el 85 por ciento de esta red asegura que comparten coche por cuestiones económicas y la web desde su creación ha permitido ahorrar a sus usuarios 255 millones de euros.
La red que nació en España en 2010 es también una herramienta para evitar la contaminación, y es que esta red que sirve de chispa a las relaciones a distancia se estima que se ha ahorrado 700.000 toneladas de CO2 hasta enero de 2014, lo que representa otra relación entre el transporte y el medio ambiente.