Ana Duato: «A Imanol y a mí nos divierte tirarnos los trastos a la cabeza»

De mal en peor. Que los espectadores no se esperen que Antonio y Merche se reconcilien en breve. El terremoto emocional que ha vivido la familia Alcántara tras descubrirse la infidelidad de Antonio tiene a Merche transida de dolor y de ira y a sus hijos desconcertados. Y la tensión va «in crescendo». Hoy, en el capítulo de «Cuéntame...», los espectadores asistirán a varios estallidos de furia entre la pareja, intentándose recolocar en esta nueva situación y procurando gestionar sus sentimientos. Ana Duato está desarmando a la audiencia con una interpretación nacida directamente de las vísceras. Si en anteriores temporadas nos habíamos habituado a verla en su rol de madre y mujer emprendedora, en ésta eclosiona el de mujer y cónyuge.

-Antonio y Merche han pasado muchas fatigas juntos: sus tres hijos en la cárcel y negocios que se van a pique. Su personaje siempre se mantenía entera, pero ante la infidelidad se desmorona.

-Es una situación que le puede y se está revolviendo como un animal herido. Está viviendo sentimientos muy pasionales y primarios: frustración, ira, desilusión... La traición es muy dolorosa porque además es consciente de que no es una aventura sin más. Antonio no sabe si está enamorado.

-Imanol Arias y usted tienen desde hace años una relación profesional de complicidad y cariño y, ahora, delante de las cámaras, peor no pueden estar. ¿Cómo están llevando esta situación?

-Nos ha costado mucho enfadarnos, pero una vez que entras en el juego de actuar... Nos estamos divirtiendo muchísimo tirándonos los trastos a la cabeza. Sin embargo, claro que nos ha sorprendido que nuestros papeles exijan que nos hagamos daño. Hemos entrado en un registro diferente y, ¿qué quiere que le diga? Desde el punto de vista interpretativo es oro puro porque Merche está desquiciada de dolor porque creía que su matrimonio era indestructible. Está herida de amor, que es lo peor que le puede pasar a una persona.

-En esta temporada todos los personajes están entrando en una catarsis. Los hijos también están viviendo los efectos colaterales de esta ruptura.

-Y lo que queda, porque también son víctimas de esta situación, como Herminia, la abuela, y Miguel, el hermano de Antonio. Su reacción, ver cómo siguen este proceso de destrucción va a ser muy importante en los próximos capítulos, porque ver cómo se está desintegrando la familia y también una serie de valores en los que creían, como la lealtad y la sinceridad que existía en la pareja.

-Es que una ruptura conyugal tiene muchos efectos colaterales.

-Sí, y no sólo para la familia; también la sufren los amigos, que se empiezan a plantear la consistencia de sus matrimonios. La reacción del barrio en el que están desde toda la vida, los comentarios, los chismorreos. Para mí, los guionistas han encontrado un verdadero filón narrativo.

-Dicen que usted, después de quince temporadas interpretando a Merche, está corriendo el riesgo de encasillarse.

-Me da igual lo que piensen porque además no es cierto. Porque a lo largo de estos años a través de Merche he interpretado a muchas mujeres: la que no se resigna a ser sólo ama de casa y estudia, la que buscaba la igualdad entre el hombre y la mujer desde la autonomía laboral, la madre y, ahora, la esposa despechada. Creo que este personaje tiene muchas aristas, como para pensar en encasillamientos.

-En unas recientes declaraciones, Imanol Arias decía que hay días en que deseaba que se terminase ya «Cuéntame...»...

-Le pillaría en un mal momento. ¡Pero si sigue siendo el motor de la serie y su entusiasmo nos lo contagia a todos! Yo creo que la serie está muy viva, no veo indicios de agotamiento ni en mí ni en mis compañeros. Es muy difícil cansarse de estar en esta serie porque continuamente plantea retos.

-Mire, no hacen más que preguntármelo. Le paso la pelota: ¿Volverán Antonio y Merche?

-No lo sé. Vivirán momentos de acercamiento, pero no creo que la reconciliación, si se produce, sea durante esta temporada. No sería coherente con los personajes.