El 79,6% quiere prohibir los macrobotellones

Ocho de cada diez creen que España tiene un problema de tolerancia con el alcohol y un 72,8% lo ve como una droga.

No es popular. Hay que decir que no y a eso pocos se atreven. Regular por ley el consumo de alcohol entre los menores es una de las grandes asignaturas pendientes en España que salta de legislatura en legislatura sin ser aprobada. Aquí no hay distingos políticos ni regionales. Hasta ahora. En el punto de mira los atracones de alcohol en concentraciones callejera de la que muy pocos menores y adolescentes escapan. El principal problema ha surgido cuando hay que acordar medidas correctivas, que van desde la prohibición por ley de los botellones en todo el país hasta la imposición de multas o condenas de trabajos en beneficio de la comunidad a los menores sorprendidos be­biendo en la calle. Poco a poco, se va avanzando. Todos los grupos menos ERC y el PNV, que se abstuvieron, aprobaron el informe de la comisión parlamentaria Congreso-Senado con medidas para erradicar el consumo de alcohol entre menores. Ahora el texto está en manos del Ministerio de Sanidad, que deberá darle forma de acuerdo a lo indicado por Las Cortes. El Gobierno ya ha avanzado que será este mismo año. Es una demanda de la calle. De toda la sociedad. Se debe acabar con los espectáculos vergonzosos de jóvenes bebiendo en la calle. Como apunta la encuesta de NC Report, la mayoría de los consultados, un 72,8% considera que el alcohol es una droga y como tal debe ser combatida. Hacerlo es responsabilidad de todos, aunque de unos más que de otros: de ahí que los consultados, en un 54,1% considere que los padres de hijos que sean cosumidores de alcohol deben ser sancionados. No se puede permitir la degradación de nuestras nuevas generaciones. Es una demanda social urgente.