El hermano de Teresa ya tiene las cenizas de Excalibur

El crematorio de mascotas San Antonio Abad Memorial Center ha entregado esta mañana las cenizas de Excálibur al hermano de la auxiliar de enfermería contagiada por ébola, según ha podido saber LA RAZÓN. José Ramón Romero y su mujer Charo ya tienen las cenizas del perro en casa, a la espera de entregárselas a Teresa y a su marido Javier Limón cuando salgan del Hospital Carlos III. Excalibur fue sacrificado ante el temor de que pudiera haberse contagiado con el virus de ébola y pudiera transmitirlo. La noticia de su sacrificio generó mucha polémica y varios representantes de grupos animalistas se acercaron al domicilio de Alcorcón para intentar evitar la muerte del animal. La Policía realizó un impresionante despliegue para evitar que el medio centenar de personas que esperaban a las puertas de la urbanización pusieran algún tipo de impedimento a los bomberos o a los sanitarios encargados de sacrificar al animal. Javier Limón intentó de forma desesperada salvar la vida de su mascota y colgó un vídeo en internet en el que pedía clemencia para el animal. Limón explicó esos días a LA RAZÓN, que lo había dejado todo preparado para el Excálibur no tuviera problemas de alimentación durante su ausencia. Dijo que le había dejado comida repartida por toda la casa y agua suficiente para un mes. Por si se le acababa el agua, le llenó la bañera para que pudiera beber en caso de escasez. Limón cedió en adopción al animal cuando ingresó en el hospital al presidente de una asociación canina, que solicitó al juez que denegara la orden de sacrificio pero no lo logró. Por ello, han anunciado que denunciarán la situación ante los tribunales.