Berlín

La Alhambra fuera de la Alhambra

El interés que despierta el monumento más visitado de España, la Alhambra de Granada, transciende los muros de este recinto nazarí, ya que el rico patrimonio que atesora se ha mostrado a lo largo de los últimos años, y continúa siendo exhibido, en museos e instituciones de medio mundo.

Madrid, Sevilla, Santiago, Vitoria, Almería, Palma, Toledo, Murcia, Málaga o Zaragoza son algunas de las ciudades españolas que han recibido sus préstamos solo en la última década, período en que hasta un total de 875 piezas de la Alhambra también han viajado a Marrakech, México DF, Le Cateau-Cambrésis, Lyon, Dallas o Berlín.

Aunque existen limitaciones en función del interés del proyecto expositivo, su calidad y las condiciones de conservación, en general el Patronato que gestiona el monumento se muestra siempre predispuesto a colaborar con otros museos e instituciones, explica a Efe su directora, Mar Villafranca.

Los préstamos del patrimonio que la Alhambra conserva a través de su museo y otras colecciones artísticas son, por tanto, parte "inherente"al trabajo que desarrolla este tipo de instituciones, en su labor de custodia pero también de difusión de la cultura.

"Las peticiones que hemos atendido a lo largo de años y las que están ahora en curso ponen de manifiesto el interés por nuestras colecciones", destaca Villafranca, que relaciona de forma directa esa demanda con el conocimiento que se tiene de las piezas que aglutina el recinto nazarí.

Precisamente por ello, el Patronato trabaja en la digitalización de sus fondos, lo que permite poder poner al acceso de la red todas sus piezas, algo ya disponible para su colección permanente y que se extenderá pronto a todo su patrimonio.

Aunque las peticiones suelen ser muy variadas y van desde material arqueológico hasta maquetas actuales, entre los elementos más demandados se encuentran sobre todo piezas de cerámica, azulejería, zócalos y maderas.

"No es normal que se presten piezas de madera, algunos museos lo tienen prohibido por su fragilidad, pero las de la Alhambra están bastante bien conservadas", precisa su directora.

Además, en contra de lo que pudiera pensarse, lo que se solicita no siempre son tesoros de oro o artilugios de gran valor porque, como ocurrió en el año del Quijote, una de las piezas más curiosas que se prestaron fueron unos chapines, zapatos de cuero únicos que eran narrados en la obra por Miguel de Cervantes.

Tengan mayor o menor valor, el proceso para el préstamo comienza en el Área de Registro del Patronato, que canaliza la petición, a la que sigue un informe de conservación y de valoración.

Posteriormente, se piden las condiciones y garantías a la institución solicitante, se estudian todos los extremos y se concluye con un informe de viabilidad que, para las piezas propiedad del Estado -aunque sean gestionadas por la comunidad autónoma-, requieren asimismo de una orden ministerial adicional.

Pese a que existen organismos y museos que han establecido un canon o tasa para sus préstamos, todo este proceso es gratuito en el caso de la Alhambra de Granada, aunque obviamente todos los gastos de logística y seguros corren a cargo del solicitante.

Se trata, en definitiva, de una fórmula más para contribuir a la difusión patrimonial, cultural e histórica, que hace más grande aún el legado de este monumento único y que la Alhambra, o más bien parte de ella, pueda ser mostrada, exhibida y disfrutada más allá de la propia Alhambra.