Sanidad presentará en julio un protocolo sanitario para casos de ablación

El Gobierno va a presentar el próximo mes de julio un protocolo de actuación sanitaria ante casos de mutilación genital, una práctica que no es exclusiva del continente africano, sino que se da en otros países, como en España, donde viven 17.000 niñas procedentes de familias que podrían practicarlas. Con motivo del Día Internacional de Tolerancia Cero a la Mutilación Genital, que se celebra el 6 de febrero, el secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Juan Manuel Moreno, ha anunciado que el Gobierno prepara con las comunidades autónomas y con organizaciones sociales un conjunto de actuaciones comunes ante la detección o las sospechas de que se podría producirse una de estas prácticas.

Entre otras medidas, se incluirán aspectos de actuaciones en pediatría, urgencias o trabajo social y cómo trasladar la información de estos casos a las fuerzas de seguridad y en su caso a las fiscalías, según han explicado a Efe fuentes de ese departamento. El borrador de este protocolo también pretende señalar los diferentes escenarios, itinerarios, aspectos de prevención, intervención, seguimiento, situación de riesgo o recuperación. En los casos en los que ya se ha practicado la mutilación, las administraciones intentarán coordinan las actuaciones sanitarias en el ámbito de la cirugía plástica y otras intervenciones.

Este tipo de violencia contra la mujer cuesta la vida de 6.000 niñas al día en el mundo, ha destacado Moreno, quien ha recordado que se trata del primer protocolo de esta características, que se enmarca dentro de la Estrategia Nacional para la Erradicación de la Violencia sobre las Mujeres. Además, el Gobierno modificará la legislación de protección a la infancia para visibilizar la mutilación genital femenina como una de las formas de violencia contra las niñas, aunque esta práctica ya está tipificada como delito de agresión sexual en el Código Penal.

"Afortunadamente cada vez más mujeres dicen no a la mutación y se enfrentan a sus familias, a sus poblados, a su tribu y hasta sus tradiciones", ha destacado Moreno, ya que son las madres, víctimas de esta práctica, las que están "liderando el cambio". "Luchar contra esta práctica requiere seriedad y coordinación, pero también mucha investigación", ha advertido la antropóloga y autora del mapa de la Mutilación Genital en España 2012, Adriana Kaplan.

La investigadora ha señalado que la ablación "más que un asunto religioso tiene que ver con una identidad étnica"y así ha explicado que se practica en familias musulmanas, cristianas coptas y judías falashas. "Hay que empezar a formar profesionales de atención primaria porque cuando una niña ya está mutilada es doble víctima, de la tradición y de la ley; sus padres van a la cárcel y ella derivada a los servicios sociales", ha alertado Kaplan.

Los flujos migratorios "están contribuyendo a trasladar esta práctica a todos los continentes", ha señalado Teresa Blat, de la Unión de Asociaciones Familiares (UNAF), quien ha recordado que la ONU exige su prohibición y castigo. Más de más de 3 millones de niñas en el mundo están en riesgo de ser mutiladas, señala la ONU