Dinero

10 situaciones en las que usar el móvil te puede costar una sanción

¿El principal motivo? Poner en peligro la vida de otras personas o violar su derecho a la privacidad

No marques este número en tu móvil: el engaño que ha destapado la Policía Nacional
No marques este número en tu móvil: el engaño que ha destapado la Policía NacionalPixabay

Te pueden meter en la cárcel por usar el móvil. Así es. Al menos, en determinadas situaciones. Algunas de ellas, como su uso al volante, ya resultan más que evidentes, pero existen otras tantas menos conocidas que pueden traer consigo sanciones. ¿El principal motivo? Poner en peligro la vida de otras personas o violar su derecho a la privacidad.

El análisis que ha realizado ComputerHoy incluye supuestos tan alejados entre sí como grabar en vídeo a un policía o usar unos auriculares mientras paseas. Y sí: tanto uno como otro puede ser objeto de multa.

Compartir vídeos de bullying

Hubo un tiempo en el que la proliferación de este tipo de contenidos aumentó considerablemente en canales como YouTube. Si bien es cierto que, hoy en día, Google ha tomado cartas en el asunto y los elimina rápidamente, también lo es que se siguen subiendo a la red con cierta frecuencia. Su grabación, publicación y distribución es un delito.

Ser pesado

La insistencia por redes sociales, a veces, puede pasar la delgada línea que la separa del ciberacoso. El hecho de enviar constantemente mensajes a una persona que nos rechaza o vigilar todos su movimientos puede dar lugar a la comisión de un delito. Esto conlleva una pena de entre tres meses y dos años de cárcel, así como una multa de 6 a 24 meses.

Espiar a otras personas

Utilizar la cámara o la grabadora del terminal para espiar a otras personas es un delito. Según el Código Penal, “el que, para descubrir los secretos o vulnerar la intimidad de otro, sin su consentimiento, se apropie de sus papeles, mensajes de correo electrónico, cartas o cualesquiera otros documentos o efectos personales o intercepte sus telecomunicaciones o use mecanismos técnicos de escucha, transmisión, grabación o reproducción del sonido o de la imagen, o de cualquier otra señal de comunicación, será castigado con las penas de prisión de uno a cuatro años y multa de doce a veinticuatro meses”.

Usar auriculares mientras paseas

Probablemente, no lo sepas, pero existen determinados casos en los que, al pasear, hay que quitarse los auriculares para evitar una multa de entre 75 y 200 euros. No te va a pasar nada si vas por una zona peatonal escuchando tu música favorita, pero si cruzas una calle o caminas al borde de una carretera, la obligación es clara: el peatón debe “apercibirse de las señales ópticas y acústicas de los vehículos prioritarios. Despejarán la calzada y permanecerán en los refugios o zonas peatonales”. Así lo recoge el artículo 122.7 del Reglamento General de Circulación.

Grabar a un agente de la policía

“El uso no autorizado de imágenes o datos personales o profesionales de autoridades o miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que pueda poner en peligro la seguridad personal o familiar de los agentes, de las instalaciones protegidas o en riesgo el éxito de una operación, con respeto al derecho fundamental a la información”, recoge el artículo 36.23 de la Ley Orgánica 4/2015, de protección de la seguridad ciudadana. Esto quiere decir que estos profesionales se encuentran especialmente protegidos respecto a su intimidad o imagen, con multas que ascienden hasta 2.000 euros.

No auxiliar a personas por estar haciendo fotos

En un momento en el que todo se comparte en tiempo real, surgen situaciones tan conflictivas como ésta: no prestar ayuda a una persona por fotografiar su accidente. Esta omisión del deber de socorro está penada con multa de tres meses a un año. Y, en el caso de que el sujeto precise ayuda por nuestra culpa, la pena será de hasta 4 años de prisión.

Colgar en la red un vídeo cometiendo un delito

Cada cierto tiempo, aparecen en los telediarios vídeos de personas que se graban a sí mismas cometiendo un delito. El supuesto más común es el de motoristas que presumen de superar la velocidad máxima legal.

Cotillear el móvil de tu hijo

Sí, por increíble que parezca, esta acción puede ser constitutiva de delito. Tras la reforma de la Ley Orgánica de Protección Jurídica del Menor, estos tienen derecho a la intimidad. Incluso, por encima de sus progenitores. Lo que significa que, si quieres controlar el móvil de tu hijo, tendrás que pedirle su consentimiento previamente. No obstante, existen excepciones: los tribunales, en ese sentido, lo han considerado cuando existe fuerza mayor. Por ejemplo, en casos de acoso.

Publicar fotos de otras personas

No se puede publicar fotos, vídeos o información de otras personas si éstas no han dado el consentimiento para ello. El reglamento de Protección de Datos de la Unión Europea es claro en ese sentido. Sin embargo, existen diversas excepciones: actuaciones autorizadas por la autoridad, personas con cargos públicos, caricaturas con uso social...

Subir vídeos de contenido sexual

Forman parte del derecho a la intimidad y la privacidad de las personas, por lo que ocurriría exactamente igual que en supuesto anterior. Ahora bien, al ser un contenido de carácter íntimo, la sanciones aumentarían de manera considerable, pues pasaría a ser considerado un delito de revelación de secretos: de dos a cinco años de cárcel.